
La rotonda de la avenida de León ya está abierta al tráfico desde este viernes 18 de julio, tras superar las pruebas de resistencia del hormigón empleado en su construcción. Por otro lado, la rotonda de la avenida Federico Silva continúa en parte cerrada, con la rotura de probetas prevista para el 4 de agosto. Según informa el concejal de Obras, Eugenio Blanco, si los resultados son positivos, se podría abrir al tráfico ese mismo día de la prueba.
Obras más lentas, pero con mayor durabilidad
El proyecto está dentro del calendario establecido, pero la duración de las obras ha sido más extensa por el uso de hormigón, un material que garantiza una vida útil mucho más prolongada sin necesidad de reformas constantes. Esta mejora supone un avance significativo respecto al anterior pavimento de aglomerado asfáltico, que, aunque requiere menos tiempo de ejecución, apenas ofrecía una durabilidad de dos o tres años.
Con este nuevo sistema constructivo, se espera que las rotondas mantengan un buen estado durante al menos diez años.
El concejal de Gestión Urbanística, Alberto Posado, ha subrayado que el objetivo principal es realizar obras que sean duraderas y que permitan una circulación fluida y sin interrupciones por baches.
“Se trata de hacer las cosas bien y para mucho tiempo”, afirmó Posado.
Años de abandono y compromiso con la mejora urbana
Desde el Ayuntamiento defienden el proyecto recordando que muchas de estas rotondas llevaban años sin ser reparadas, con un firme deteriorado que causaba malestar entre los vecinos. Por eso, apelan a la paciencia y aseguran que el resultado final compensará los inconvenientes actuales.
Trabajos de aglomerado y reparación de badenes en la primera fase
En esta primera fase también se han completado los trabajos de aglomerado en varios viales de Benavente y los arreglos de badenes, tareas esenciales para garantizar un pavimento en buen estado y mejorar la seguridad vial en las zonas de intervención.






