La investigación sobre la segunda agresión ocurrida en Benavente en las últimas semanas está muy avanzada, aunque la Guardia Civil aún no ha identificado con total certeza al presunto agresor, según confirmó este viernes el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco.
“Está muy avanzada, pero todavía no al cien por cien, porque una cosa es creer quién es y otra tener garantías y pruebas de que lo es”, explicó Blanco, subrayando la importancia de actuar con rigor antes de señalar responsabilidades.
El suceso, registrado el pasado fin de semana, dejó como víctima a un joven que sufrió heridas en un brazo que requirieron seis puntos de sutura. En un primer momento se informó de que el ataque se había producido con un arma blanca, pero las investigaciones apuntan ahora a dudas sobre el objeto empleado.
“No decimos que no fuese con arma blanca, pero pudo ser también con un vaso”, matizó el subdelegado.
Blanco insistió en que lo esencial es esclarecer los hechos con pruebas sólidas, y pidió prudencia hasta que concluyan las diligencias. “Lo importante es confirmar los datos antes de dar nada por hecho”, señaló.
El representante del Gobierno destacó además la eficacia de la Guardia Civil y su coordinación con la Policía Local, recordando que tanto esta agresión como la ocurrida la semana anterior —en la que se usó un machete y el autor fue detenido en Asturias— son hechos aislados.
“Lo preocupante es igual, ocurra con arma o sin ella. Lo importante es evitar que nadie lleve objetos peligrosos, porque el resultado puede ser muy distinto”, advirtió Blanco, quien anunció un refuerzo temporal de vigilancia en las zonas de ocio nocturno de Benavente.
