El Parque de Bomberos de Benavente vivió ayer, domingo 10 de agosto, una intensa jornada de trabajo al responder a dos avisos de incendios en la provincia, concretamente en las localidades de Villar de Fallaves y Colinas de Trasmonte.
La rápida coordinación con otros cuerpos y la colaboración ciudadana resultaron claves para minimizar daños.
Incendio medioambiental en Villar de Fallaves
A las 18:14 horas, el Centro Coordinador de Emergencias alertó de un incendio medioambiental en Villar de Fallaves, muy próximo a naves y viviendas.
Ante la falta de medios disponibles del servicio de incendios de Medio Ambiente, el Parque de Bomberos de Benavente respondió rápidamente, coordinándose con los bomberos de la Mancomunidad de Tierra de Campos.
A la llegada de los bomberos de Benavente, el fuego ya estaba bajo control gracias a la rápida intervención inicial de los bomberos de Tierra de Campos y, especialmente, a la colaboración activa de los vecinos, algunos de los cuales utilizaron tractores para ayudar en las labores de extinción.
Gracias a este esfuerzo conjunto, se logró evitar que las llamas alcanzaran viviendas y naves, limitando el incendio a tierras cosechadas, solares con rastrojeras y material de labranza. En las tareas también participaron agentes de la Guardia Civil de Villalpando, garantizando la seguridad en la zona.
Reconocimiento a voluntarios y protección civil
El Ayuntamiento de Benavente ha reiterado su agradecimiento a los bomberos del parque local y, de forma especial, a los voluntarios de la Agrupación de Protección Civil de Benavente.
Estos últimos permanecieron toda la noche atentos a las personas trasladadas al polideportivo de Camarzana de Tera, donde se instalaron con material facilitado por la Junta de Castilla y León.
En total, 11 voluntarios trabajaron para garantizar la seguridad y el bienestar de los vecinos afectados.
Incendio en Colinas de Trasmonte
Aunque la intervención en Colinas de Trasmonte no registró incidentes graves, la movilización de medios y la coordinación intermunicipal fueron esenciales para prevenir la propagación de las llamas, evidenciando una vez más la importancia de la respuesta rápida y de la colaboración entre servicios de emergencias.
