Con voz decidida y la mirada puesta en el futuro, Carlos, miembro del equipo Ámbar Team, se prepara para vivir un momento clave en su trayectoria: su debut oficial en el evento de deportes de contacto más grande de Castilla y León. Una experiencia que, asegura, ha sido posible gracias a su constancia, el apoyo de su equipo y el haber superado el miedo inicial a entrar al gimnasio.
Romper barreras y lanzarse al ring
“Siempre me ha gustado este deporte, pero no fue hasta hace un año cuando decidí dejar el miedo atrás y apuntarme al gimnasio”, cuenta Carlos. “Creo que el mayor reto para muchos es ese primer paso: atreverse a empezar”.
Ese paso lo dio en el Ámbar Team, un equipo que destaca por su preparación técnica y exigencia física. Desde entonces, Carlos entrena intensamente cada semana, con el objetivo claro de superarse y llegar lo más lejos posible.
“Estamos entrenando muchísimo en el Ámbar Team y salimos más que preparados”, afirma convencido. “Estoy confiado y sé que voy a ganar. Espero salir del combate con la mano levantada”.
Del debut amateur al sueño profesional
Este debut no es solo un combate: es el inicio de un camino hacia el profesionalismo. Carlos lo tiene claro: su primera meta es construir un buen récord amateur y, a partir de ahí, dar el salto al circuito profesional.
“Es un sueño que todo luchador tiene. Desde el Ámbar Team nos forman muy bien y vamos a por ello con todo”, subraya.
Además, destaca el nivel del evento en el que va a competir: “Es el mejor evento de Castilla y León, lo hemos demostrado muchas veces y va a seguir siendo así”.
Una historia que inspira
La historia de Carlos no es solo la de un deportista que compite, sino también la de un joven que vence sus miedos, trabaja duro y se enfrenta a sí mismo para crecer. Su testimonio refleja el espíritu de muchos otros luchadores que, desde equipos como el Ámbar Team, apuestan por su pasión y hacen del sacrificio diario su mejor arma.
