DEPORTES

El Desguaces Casquero sigue buscando llegar a la Copa del Rey

Charlie conseguía en el último suspiro el tanto de la victoria tras un partido el que debieron de tener más premio.

DESGUACES CASQUERO 2.- Mañanes, Javi Cala, Christian, Malaguti y Charlie. Luego jugaron, Joselu, Álex, Arafa, Samu, Zorro, Yayo y Tomy.

PIZARRAS TRES CUÑADOS 1.- Kiko, Juanma, Bruno, Dilín y Óscar Durán. Luego jugaron, Javi, David, Josiño, Bencho y Maelo

Árbitro.- Cañas Mañas y Marazuela Hernando. Amonestaron a Malaguti, Charlie, Joselu y Samu por parte local y a Javi y Óscar Durán por los gallegos.

Goles.- 1-0 Zorro (11´), 1-1 Óscar Durán (34´), 2-1 Charlie (39´).

El Desguaces Casquero sigue, calculadora en mano, contabilizando los puntos que quedan por disputarse para intentar la machada de colarse en los puestos que dan derecho a la disputa de la Copa del Rey. Pero para ello antes debían de agarrar los tres que se encontraban en juego en la Rosaleda, con muchos claros en las gradas, ante el Pizarras Tres Cuñados. Tal es el punto de competitividad que existe entre los equipos que pelean por este objetivo, toda vez que la liga ya tiene dueño, que los nervios afloran a la mínima y pueden jugar una mala pasada como sucedió tras el pitido final con una tangana en el campo que tampoco llegó a mayores.

Y es que aquí nadie quiere regalar nada a nadie y la cancha es el mejor juez para interpretar la dirección de los puntos en juego. El Desguaces Casquero, que viene manteniendo una racha realmente positiva, se ha visto con la posibilidad de meterse en el número de plazas que dan esa botina posibilidad de seguir en modo competición tras el final de liga y quien sabe si tener la suerte de encontrar un rival que decore más este deporte en Benavente.

Por ello el conjunto entrenado por Miguel Ángel Macías salió en busca de esos puntos que estaban en juego aun a sabiendas de que el Pizarras Tres Cuñados llegaba como segundo en la tabla demostrando que la temporada del cuadro del Barco de Valdehorras ha sido muy buena. A pesar de todo, los gallegos se vieron sorprendidos por la salida de los chatarreros que sin ser demasiado agobiantes sí que les concedían opción alguna de encontrar a un gran Mañanes. Los benaventanos robaban de forma continuada, merced a lo adelantadas que presentaban sus líneas pero fallaba el último pase o cuando esto no era así Kiko aparecía milagrosamente para salvar a los suyos. De hecho el meta gallego evitó con sus intervenciones que el marcador estuviera casi sentenciado al descanso.

El balón se acercaba una y otra vez a las inmediaciones del área gallega, pero los rematadores no aparecían con jugadas al segundo palo que se perdían en el limbo. Samu, en permanente crecimiento, se zafaba de su rival a los cinco minutos por banda izquierda y su potente disparo se encontraba con el poste derecho de la meta gallega. Un minuto después fue Charlie el que tras un saque de banda al lado contrario empala de primeras para que de nuevo aparezca Kiko para encontrase una pelota que se iba dentro. Cuatro minutos después debió de obrar de nuevo el milagro en una doble ocasión de Zorro y a las que respondía felizmente.

Corría el minuto 11 de juego cuando el conjunto gallego intentaba salir desde atrás con el balón controlado en una acción por banda derecha. Zorro salió a tapar esa jugada y el defensor visitantes se hizo un lío que dejaba a pies del benaventano un balón franco para encarar a Kiko cosa que no desaprovechaba y punteando el balón lo colaba junto a la cepa derecha del portal gallego. El gol estaba dando el premio merecido al Desguaces Casquero que ya debía de ir con anterioridad por delante.

A estas los gallegos aparecían en segunda jugadas o en el lanzamiento de alguna falta que sin demasiados problemas solucionaba el cuadro local. Al minuto del tanto de Zorro, Josiño tuvo la posibilidad del empate en una jugada en la que se va tras una diagonal y que le permite encontrar una posición franca para el disparo al que Mañanes respondía con una buena intervención. A los 13 era nuevamente Kiko el que evitaba el segundo tras un disparo de Malaguti.

El conjunto local pasó a tomarse unos pequeños momentos de respiro, como también había hecho tras el gol en demasía y que obligaba a un toque importante de atención de Miguel Ángel Macías a través de un tiempo muerto.

Antes del descanso Mañanes desbarataría una ocasión de Bruno con una muy buena parada.

Tras el descanso el partido cambiaba. Los gallegos que estaban por debajo en el marcador y veían peligrar la segunda plaza salieron algo más participativos y los benaventanos ya no estaban tan cómodos sobre la cancha. La defensa chatarrera seguía dando muestras de contundencia y ese trabajo del conjunto estaba siendo importante para que los barquenses no encontraran el empate. Un empate que vendría en la única laguna defensiva local que aprovechaba Óscar Durán para despachar otro partido diferente. Con mucho tiempo aun por jugar los dos equipos empezaron a tomar precauciones, sin arriesgarse a errores que pudieran tener un caro precio.

Se consumía el último minuto y las hostilidades se rompieron en busca del KO definitivo de uno o del otro. De hecho los locales se estaba jugando el partido a la carta de la victoria sabiendo que podían perder y la entrada del portero jugador evidenciaba que no valía otra cosa que no fuera ganar. Además de aliviar un tanto el esfuerzo físico al cual le estaba sometiendo el rival, la escuadra blanquiazul asediaba el marco de Maelo hasta que a falta de poco más de medio minuto para el final Charlie encontraba la portería para deshacer el empate. Tuvo tiempo el cuadro de Xocas Miranda para igualar de nuevo con el lanzamiento de un doble penalti que se iba fuera y que cerraba definitivamente el partido.

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