Tras la ilusión de Jorge en MasterChef Junior, ahora su madre, Ana Sobejano Rodríguez, se presenta a MasterChef World, la edición internacional del talent culinario más famoso de la televisión.
Con la pasión por la cocina como bandera, Ana afrontó la primera fase del concurso con la misma ilusión que su hijo. En esta edición online, los participantes tenían que presentar su plato en vídeo y conseguir un número determinado de votos para pasar de fase, algo que, según Ana, la animó aún más a presentarse.
El vínculo con la cocina es una herencia familiar. Ana aprendió entre fogones de su madre y, a su vez, fue ella quien despertó en Jorge esa pasión que lo llevó hasta las pruebas finales de MasterChef Junior.
Para conquistar al jurado, Ana apostó por la tradición con un aire renovado: un pollo con reducción al vino tinto acompañado de champiñones al ajillo y un tomate confitado en forma de flor, un plato que combina recuerdos familiares con su estilo personal.
Con el pase a la siguiente fase, Benavente ya celebra esta doble apuesta culinaria. Madre e hijo han demostrado que la pasión, la constancia y la tradición son ingredientes que, juntos, pueden abrir las puertas de cualquier cocina.
