Zamora ha vivido este domingo por la mañana una de las citas más entrañables de la Navidad con la papanoelada motera en Zamora, que ha alcanzado ya su novena edición con una destacada participación y un marcado carácter solidario.
Desde primeras horas del día, cientos de aficionados a las dos ruedas, ataviados con los clásicos trajes rojos y la barba blanca de Papá Noel, y algunos incluso con el inconfundible atuendo verde del Grinch, han tomado las calles de la ciudad despertando sonrisas, aplausos y la ilusión de los más pequeños.
La salida, adelantada media hora respecto a ediciones anteriores, tuvo lugar a media mañana desde la Plaza Mayor, desde donde la comitiva motera, escoltada por la Policía Municipal, inició su recorrido por diferentes calles de Zamora en un ambiente festivo y familiar. El desfile se dirigió hasta el Banco de Alimentos de Zamora, ubicado en la carretera de Villalpando, con paso previo por el barrio de San José Obrero.
En este punto se realizó la entrega de alimentos no perecederos, destinados a personas y familias con menos recursos, con el objetivo de que también puedan disfrutar de una Navidad digna. Una acción solidaria que vuelve a situar a la papanoelada como una de las iniciativas más queridas del calendario navideño zamorano.
Tras cumplir con el objetivo solidario, la jornada concluyó en el bar El Secreto, en el entorno de los Tres Árboles, donde los participantes compartieron un aperitivo y brindaron por unas felices fiestas, poniendo el broche final a una mañana marcada por la convivencia, la solidaridad y el espíritu navideño.
