Unión del Pueblo Leonés (UPL) Benavente ha denunciado públicamente la gestión “nefasta y dilatoria” del equipo de gobierno municipal en relación con las obras de las rotondas de Federico Silva y la carretera de León, calificando la situación como una “tomadura de pelo” a la ciudadanía.
Desde la formación regionalista se critica que el Ayuntamiento haya tratado de justificar los retrasos con argumentos técnicos que, a juicio de UPL, no se sostienen. En concreto, consideran una “excusa injustificable” la alusión al largo tiempo de fraguado del hormigón con fibra, una técnica que, según la documentación técnica básica y la experiencia en obra civil, no requiere de los plazos extraordinarios que se están aplicando.
UPL recuerda que el fraguado inicial de este tipo de hormigón se alcanza en apenas unos días y que el endurecimiento completo se logra en menos de un mes, por lo que consideran que podrían haberse adoptado soluciones técnicas o de gestión del tráfico, como restricciones temporales al paso de vehículos pesados, para evitar los graves inconvenientes actuales.
Mientras el equipo de gobierno defiende la supuesta innovación de los materiales utilizados, los vecinos de Benavente continúan sufriendo los efectos de un retraso inasumible en infraestructuras clave para la movilidad urbana. Las rotondas afectadas, que conectan algunos de los principales accesos y arterias de la ciudad, permanecen cerradas desde hace meses, provocando desvíos constantes, pérdida de tiempo y alteraciones en el tráfico rodado que afectan al conjunto de la ciudadanía. UPL plantea serias dudas sobre si este retraso se debe a una falta de previsión y coordinación o, como temen, a problemas en la gestión de contratas y recursos que el Ayuntamiento no ha querido hacer públicos. “No es la primera vez que en Benavente unas obras se eternizan, dejando patente la incapacidad del equipo de gobierno para planificar, ejecutar y dar soluciones eficaces”, señalan desde la formación. Por todo ello, UPL exige al Ayuntamiento que ofrezca explicaciones claras, transparentes y técnicamente fundamentadas sobre los motivos reales de los retrasos, al tiempo que reclama el fin inmediato de lo que consideran un “esperpento vial” que perjudica gravemente a la ciudad.
