
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, se dirigió a los castellanos y leoneses desde el Museo de la Evolución Humana de Burgos, un lugar cargado de simbolismo al cumplirse 15 años de su apertura y 25 años desde que Atapuerca fue reconocida como Patrimonio de la Humanidad. Desde allí, Mañueco afirmó: “Queridos castellanos y leoneses, un año más me dirijo a vosotros para desearos una feliz Navidad y un 2026 lleno de salud, alegría y oportunidades”.
Destacó que este museo no solo es un referente científico mundial, sino también “un símbolo de continuidad, nos recuerda que una comunidad es presente, pero también memoria, responsabilidad y futuro”.
Haciendo balance del año que termina, señaló: “En 2025 ha crecido nuestra economía, tenemos más gente trabajando que nunca y lo hemos hecho con los impuestos más bajos de nuestra historia”. Además, subrayó el fortalecimiento de los servicios públicos: “También hemos reforzado nuestros servicios públicos y podemos decir con orgullo que somos la primera comunidad en educación, en servicios sociales y en atención a la dependencia. Y somos la segunda en sanidad”.
Mañueco destacó que estos logros son fruto del esfuerzo de todos y añadió: “Nada de lo logrado se explica sin el esfuerzo de todos. Y me siento satisfecho de la parte que corresponde al Gobierno de Castilla y León aportando estabilidad, gestionando con eficacia y poniendo en marcha medidas que mejoran la vida de la gente”.
El presidente enumeró medidas concretas que han impactado en la vida de los ciudadanos: “Ahí están hechos concretos, la educación gratuita de 0 a 16 años, el autobús gratuito con la tarjeta BusCyL o el mayor impulso a la vivienda pública que hemos conocido en nuestra comunidad”.
Más allá de las cifras, puso ejemplos de historias reales: “Como cuando María Luisa nos cuenta que ha cambiado sufrimiento por esperanza gracias a la nueva unidad del dolor crónico del centro de salud elegido en León, o cuando compartimos la ilusión de Fran al impulsar su barbería en Benavente con ayudas de la Junta al Autoempleo, o la de Fanny al mantener abierto el bar de Pajares de Adaja en Ávila con el apoyo del Gobierno de Castilla y León, o la de Noelia que, gracias a las ayudas de la modernización del campo, puede sacar adelante su explotación agrícola en Cavia, en la provincia de Burgos”.
De cara a 2026, el presidente hizo un llamamiento a la responsabilidad política: “Debemos seguir creciendo, atrayendo talento, creando empleo y haciendo de Castilla y León un lugar con más oportunidades para los jóvenes, con mejor atención para las personas mayores, donde las familias vivan mejor y donde se pueda construir un proyecto de vida con tranquilidad”.
Sobre las próximas elecciones autonómicas, indicó: “En 2026 celebraremos elecciones autonómicas y se abrirá una nueva etapa política que nos exigirá a todos altura de miras, serenidad y una idea clara, decidir con responsabilidad. Y no podemos dejar que el estruendo del día a día, la trinchera y la división, nos haga perder de vista lo esencial”.
Finalmente, enfatizó la importancia del legado histórico de Castilla y León: “Castilla y León tiene el deber de estar a la altura de su legado y de aportar a España lo que tantas veces le ha dado en su historia, estabilidad, sentido de Estado y vocación de concordia, porque cuando esta tierra se afirma en lo mejor de sí misma, España es capaz de caminar segura hacia su destino”.
El mensaje concluyó con un deseo de prosperidad: “Con esa voluntad os deseo que 2026 traiga salud, esperanza y prosperidad para todos. ¡Feliz Año Nuevo!”






