
La Policía Nacional ha logrado desarticular un grupo criminal itinerante especializado en robos en viviendas habitadas en Zamora. Los detenidos, al menos tres personas, actuaban durante la noche, llegando a marcar más de 50 domicilios para seleccionar sus objetivos.
En el momento de la detención, se les intervino una gran cantidad de joyas recién sustraídas, junto con herramientas especializadas para violentar cerraduras. Además, el vehículo que utilizaban estaba adaptado para ocultar objetos robados, dificultando su localización en posibles controles.
Modus operandi: cómo actuaban
Este grupo criminal, que generalmente reside en grandes ciudades para pasar desapercibido, se desplazaba en vehículos alquilados por distintas zonas de España. Su método consistía en:
- Marcar puertas con hilos de pegamento o pequeños plásticos apenas visibles días antes del robo.
- Si las marcas permanecían intactas, significaba que los moradores no estaban y tenían “vía libre” para actuar.
- Aprovechaban la nocturnidad para entrar y robar sin ser detectados.
Gracias a la colaboración ciudadana, la policía pudo detectar las marcas en varias viviendas, iniciando la investigación que llevó a la captura del grupo.
Operativo policial y detenciones en flagrancia
Los agentes montaron un dispositivo nocturno y detectaron un vehículo de alquiler cerca de las viviendas marcadas. Poco después, sorprendieron a un hombre escondiendo herramientas y joyas bajo arbustos. Al registrar el inmueble, localizaron a otros dos sospechosos intentando huir y deshacerse del botín.
En total, los agentes recuperaron las joyas y el dinero robados, además de incautar las herramientas utilizadas para forzar las puertas. El vehículo de alquiler contaba con varias “caletas” para ocultar el botín y evitar su detección.

Antecedentes y situación judicial de los detenidos
La investigación reveló que los arrestados usaban distintas identidades y varios contaban con antecedentes penales. Uno de ellos tenía una orden judicial de búsqueda, detención y expulsión del país, mientras otro tenía prohibida la entrada en territorio Schengen.
Tras la detención, fueron puestos a disposición judicial, y se decretó su ingreso en prisión provisional, imputados por robos con fuerza y pertenencia a grupo criminal.
La importancia de la colaboración ciudadana
Este caso subraya la relevancia de la colaboración ciudadana para combatir la delincuencia. La Policía Nacional, dentro de la campaña “Turismo Seguro”, recordaba recientemente la necesidad de estar atentos a marcas sospechosas en las puertas al ausentarse del hogar.
Gracias a la información aportada por un vecino, se pudo detener a este grupo y devolver las joyas a sus legítimos dueños. La implicación social sigue siendo clave para mantener la seguridad en nuestras ciudades.







Ahora lo que hace falta es que el Juez también haga su trabajo y ponga a cada uno en su sitio