
El incendio de Puercas, ubicado en la Sierra de la Culebra, ha vuelto a recrudecerse debido a fuertes rachas de viento, lo que ha puesto en grave peligro a los pueblos de Abejera de Tábara y Riofrío de Aliste. En Abejera, las llamas han devorado la estación del pueblo, mientras que en Riofrío, el fuego se ha reproducido en varios puntos, llegando incluso a saltar la vía del tren. Además, las llamas avanzan hacia Ferreras de Abajo, aumentando la alarma entre los vecinos.
Las pavesas generadas por el viento dificultan el control del incendio, provocando nuevos focos que se extienden de manera imprevisible.
La esperanza en la lluvia
Las autoridades han depositado la esperanza en las lluvias, que comenzaron alrededor de las 15:00 horas en Carbajales. Sin embargo, para ser realmente efectivas, las precipitaciones necesitan ser constantes y acercarse a la zona afectada. En días anteriores, las lluvias cesaron demasiado pronto, humedeciendo solo parcialmente el terreno.
Operativo de emergencia
Para controlar el incendio, la Junta de Castilla y León ha desplegado 49 medios de extinción, incluyendo cuatro aéreos, y la Unidad Militar de Emergencias (UME) se ha sumado al operativo.
Aunque aún no hay confirmación oficial, todos los indicios apuntan a que el incendio de Puercas podría haber sido intencionado, y hasta el momento ha arrasado unas 3.000 hectáreas, con riesgo de aumentar en las próximas horas.






