El pasado sábado 6 de septiembre, el Hostal Alameda de Benavente acogió un encuentro lleno de emoción y nostalgia: los antiguos alumnos del Colegio Virgen de la Vega de la promoción de bachillerato 1970-1976 celebraron su reencuentro medio siglo después. Fue una cita marcada por las sonrisas, los abrazos y las conversaciones que devolvieron a todos a los pasillos y aulas de aquella época inolvidable.
Durante la reunión, no faltaron los recuerdos de los pupitres de madera rayados con iniciales, las aulas frías en invierno y calurosas en verano, y el timbre de las once que anunciaba el recreo más esperado del día. Aquellos minutos en el patio, entre partidos de fútbol con balones de cuero, canastas de baloncesto y confidencias entre amigos, volvieron a cobrar vida en las anécdotas compartidas. También se evocaron las voces de la megafonía con frases que aún resuenan en la memoria: “Benavides, visita”, “Martín Berrocal, al teléfono”, o los gritos de euforia tras un “gol de Aliste” o una “canasta de Mulero”.
La emoción fue creciendo al comprobar que, pese al paso del tiempo, la ilusión juvenil permanece intacta. Medio siglo después, los antiguos compañeros redescubrieron que aquellos años no fueron solo un periodo de estudio, sino una etapa que marcó sus vidas para siempre. Como recordaron algunos asistentes, “el tiempo nos cambió, pero seguimos siendo los mismos”.
Este reencuentro de antiguos alumnos del Colegio Virgen de la Vega en Benavente no solo fue una celebración de amistad, sino también un homenaje a la memoria colectiva de una generación que, entre libros, juegos y sueños, dejó escrita una parte de la historia de la ciudad.
