
La gripe aviar sigue generando preocupación en la provincia de Zamora, especialmente en la zona de Villafáfila, conocida por sus lagunas y la presencia de aves migratorias. Según Fernando Prada, delegado de la Junta en Zamora, los análisis realizados en agosto confirmaron la presencia del virus en seis aves encontradas muertas, pero desde entonces no se han detectado nuevos casos.
“Desde el mes de agosto no han aparecido más aves muertas en las lagunas de Villafáfila. Estamos en continua vigilancia y extremando las medidas de bioseguridad”, explicó Prada.
Vigilancia y medidas preventivas

Actualmente, 54 explotaciones avícolas en Zamora se encuentran bajo estricta supervisión. Las autoridades recomiendan protocolos de bioseguridad para prevenir la propagación del virus y aseguran que el consumo de huevos y carne avícola cocinada es seguro para la población.
Prada recalcó que la transmisión de la gripe aviar a humanos es poco probable y requiere contacto intenso y directo con aves infectadas, algo que no afecta a la mayoría de la población. Además, se recomienda a los trabajadores en contacto con aves que se vacunen contra la gripe estacional como medida complementaria.
Vigilancia de las lagunas
La Junta realiza un seguimiento continuo en las lagunas de Villafáfila y sus alrededores para detectar cualquier ave con síntomas de infección. En caso de aparición de nuevas aves muertas, se activa un protocolo oficial: los servicios veterinarios toman muestras y las envían a laboratorios especializados para análisis.
Con la llegada del frío y el paso de aves migratorias, las autoridades mantienen una vigilancia constante para prevenir un posible rebrote.






