
Zamora ha vivido este viernes una jornada histórica con la firma del hermanamiento entre la ciudad y Beit Jala, en Cisjordania. El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, y el alcalde de Beit Jala, Issa Farah Issa Janineh, rubricaron el acuerdo en un acto celebrado en el Salón de Plenos, con la ministra de Juventud e Infancia, Sira Abed Rego, como testigo de honor.
Guarido destacó que este hermanamiento “va más allá del intercambio cultural o económico”, al tener “un plus añadido de carácter político”, con el objetivo de dar visibilidad al conflicto que se vive en Gaza y mostrar el respaldo de Zamora al pueblo palestino.
Durante su intervención, el alcalde de Beit Jala agradeció la iniciativa del Ayuntamiento de Zamora y recordó las históricas relaciones entre España y Palestina, asegurando que “la voluntad del pueblo palestino no será derrotada y la voz de la cultura y la libertad jamás será silenciada”.
Por su parte, la ministra Sira Abed Rego, de ascendencia palestina, subrayó el profundo significado del acuerdo, al que definió como un acto de fraternidad. “Zamora se hermana con Beit Jala y dice que no habrá paz sin justicia, ni justicia sin verdad, ni verdad sin la voz del pueblo palestino”, afirmó la representante del Gobierno, recibiendo una gran ovación.
El acto institucional marca el inicio de un programa de actividades culturales que se desarrollará durante todo el fin de semana. Esta tarde se proyectará el corto “Era sueño”, de la directora gazatí Hannen Kulab, seguido de una conferencia-coloquio en el Salón de Plenos.
Mañana, la plaza Mayor de Zamora acogerá un mercadillo con productos típicos palestinos, una degustación gastronómica solidaria, y la muestra fotográfica “Para contar mi historia”, con imágenes que reflejan la vida cotidiana en Palestina.
La programación continuará con una lectura de poesía de autores palestinos, un desfile de trajes tradicionales, la lectura de un manifiesto a cargo de la Plataforma Zamorana contra el Genocidio en Gaza, y cerrará con las actuaciones musicales de Luis Farnox y Alma Sanz, seguidas del baile tradicional palestino Dabke, interpretado por el grupo Tarwida Dabke.
El hermanamiento, aprobado en el último pleno del Ayuntamiento de Zamora, refuerza el compromiso de la ciudad con la paz, la igualdad y la cooperación internacional. Tanto Guarido como Rego coincidieron en que la fraternidad entre pueblos es la base de una convivencia justa y duradera, y que este acuerdo será el inicio de futuros proyectos en educación, juventud, cultura y medio ambiente.






