«Una reunión intensa, pero productiva». De este modo se resaltaba el balance de la reunión celebrada este mediodía en el Ayuntamiento de Benavente en la Comisión de Seguimiento del Plan Territorial de Fomento. Significativo ha sido que los representantes de la Junta de Castilla y León, de la Diputación Provincial y del Consistorio Benaventano hayan llegado a un acuerdo para que el proyecto del polígono industrial pueda ser una realidad, se permita su aprobación inicial en el próximo 2023. «Si todo se hiciera a través de una mesa de trabajo, en lugar de cada uno salir a la palestra en los medios dando su versión, todo saldría adelante», apuntaba el representante de UGT , Ángel Del Carmen, al finalizar la reunión.
El caso es que tras dos horas de reunión, el acuerdo alcanzado entre las tres administraciones pasa porque a principios de año, después del periodo vacacional, los técnicos definan el coste final para que se pueda aprobar inicialmente el proyecto. En todo esto media 1 millón de euros de diferencia en las cifras que maneja la Junta, 11,4 millones y los 12,4 millones que manejan los técnicos municipales. Ambas partes se han comprometido, además, a incrementar el porcentaje de participación si fuese necesario. El Ayuntamiento de Benavente asumiría el incremento de su participación de 3 millones, cantidad similar a la de la Diputación, siempre con un tope de 300.00 euros más, señaló el alcalde Luciano Huerga, y la Junta aporta 5,1 millones, lo que se define en un porcentaje del 43% mantenido desde el primer momento como compromiso, según quiso resaltar la delegada territorial, Leticia García. Todo se trata porque el proyecto del Puerta del Noroeste sea una realidad en 2023, a partir de esa puesta en marcha de la financiación. De ahí las caras sonrientes de los participantes en la reunión anunciando a los medios el acuerdo alcanzado.
Tensas discrepancias antes de la reunión
No obstante, las espadas estaban en alto momentos antes de la reunión de la Comisión de Seguimiento. Las posturas se encontraban enfrentadas y se mantuvieron hasta el final. En una comparecencia previa a la Comisión de Seguimiento del Plan, la Junta, a través de su delegada territorial, planteó dos alternativas para debloquear la situación. Se trataría de firmar en enero, mediante convenio u otra forma jurídica, el compromiso en firme de la financiación del 43% por parte de la administración regional y la otra alternativa pasaría porque la Junta fuera la que desarrollase el polígono en lugar de hacerlo el promotor, el Ayuntamiento benaventano, quien cedería los terrenos después de su expropiación a la Junta. Para la delegada territorial, Leticia García, «la Junta siempre ha estado abierta al diálogo para desbloquear el proyecto y poder avanzar, apuntando además que el Gobierno de la Comunidad había aportado ya 26 millones de euros en el desarrollo del Plan Territorial de Fomento que comprende, además, al polígono de Villabrázaro y al de San Cristóbal, no solo al Puerta del Noroeste de Benavente. Por eso insistía, todo ello antes de la reunión, a un llamamiento a la cordura entre las partes. «La Junta ha mantenido desde el principio el compromiso del 43% de inversión en el Puerta del Noroeste», resaltaba Leticia García. «Ese compromiso se puede plasmar ya por escrito», aseguró.
Sin embargo, el alcalde Luciano Huerga, rechazaba de plano esas alternativas planteadas, incluso llegando a desmentir los argumentarios expuestos por las representantes de la administración regional, tanto la delegada como la directora general de Política Económica y Competitividad, Rosa Cuesta y la directora general de Trasnportes y Logística, Laura Paredes. «El relato parte de premisas erróneas», señalaba Huerga apuntando a no ser el alcalde quien había solicitado la ampliación del plazo, sino la mesa del diálogo social. Del mismo modo, se refería el alcalde a la totalidad del coste cifrado por los técnicos municiaples en 12,4 milones en lugar de 11,4 millones. «Se trata de cubrir estos costes, única y exclusivamente. Se necesita el compromiso por escrito. Con mayor énfasis se pronunciaba el alcalde ante las alternativas propuestas por la Junta. «Les adelanto que los benaventanos queremos ser dueños de nuestro destino. Este territorio tiene derecho a tener futuro, a enriquecerse. Los benaventanos tienen derecho a enriquecerse como sociedad y como actividad económica». Abogaba el regidor benaventano por el hecho de que no se puede dar la aprobación inicial del proyecto si no existe la financiación completa. «Nosotros somos capaces de desarrollar el polígono», concluía Huerga.
Todo esto sucedía antes de la reunión de la Comisión de Seguimiento del Plan Territorial de Fomento, porque al final de ésta, las caras se notaban más distendidas, incluso los representantes llegaron a reunir sus manos para posar ante las cámaras. Por el «feliz» acuerdo alcanzado, término así destacado por los intervinientes.
