La esperada reapertura de la rotonda de Federico Silva ya tiene fecha: será el jueves 7 de agosto, según ha confirmado el Ayuntamiento. La infraestructura, clave para el tráfico de entrada y salida en la ciudad, ha permanecido parcialmente cerrada durante meses debido a una intervención técnica compleja y al uso de materiales especiales que requerían tiempos de curado prolongados.
El concejal de comunicación, Jose Manuel Salvador, ha explicado que las obras se han ejecutado dentro del plazo previsto por el contrato de adjudicación, que era de cuatro meses. «Se abrirá la semana que viene, en principio, es lo que está previsto. Se ha utilizado un cemento especial, con mucha más dureza, que necesita 21 días para su correcto curado», señaló, subrayando que los trabajos avanzan según lo planificado.
Uno de los factores que ha condicionado el desarrollo de la obra ha sido la necesidad de mantener operativo el acceso a una gasolinera y a un establecimiento comercial situado en la zona. Esto obligó a ejecutar los trabajos en varias fases. «Hubo que hacer primero tres cuartas partes y dejar una sin hacer hasta que estuviera la otra, para no cortar completamente el paso», detalló el representante del consistorio.
Desde el Ayuntamiento también han recordado que este mismo sistema de construcción ya se aplicó en la rotonda de Valcarce bajo el anterior equipo de gobierno, y que entonces también se registraron tiempos de cierre similares. En ese sentido, han respondido a las críticas actuales asegurando que la situación no difiere de la vivida en aquel momento.
Contratiempos con la obra de la rotonda
Otro de los contratiempos ha sido la escasez de personal especializado, un problema que afecta a múltiples sectores y que en este caso obligó a cambiar de subcontrata a última hora. «La empresa que subcontrataron para echar el producto no vino y tuvieron que hacerlo con otra», explicó el portavoz, asegurando que estuvo presente durante esa gestión.
Pese a los inconvenientes, desde el gobierno municipal insisten en que todo se ha coordinado junto a la Policía Local, los técnicos de Urbanismo y la empresa responsable de la señalización para minimizar el impacto en el tráfico y garantizar la seguridad.
La reapertura de la rotonda supone el final de una intervención que ha generado malestar entre algunos vecinos y comerciantes por la duración de las obras. El Ayuntamiento defiende que, con este nuevo firme más resistente, se garantiza una mayor durabilidad en el tiempo y una mejora sustancial en la movilidad de la zona.
