El Ayuntamiento de Zamora ha puesto en marcha la transformación de la histórica finca de La Josa, un espacio de más de 5.000 metros cuadrados que hasta ahora se encontraba en desuso. Las obras han comenzado gracias a un acuerdo con la asociación de vecinos de San José Obrero, que ha cedido los terrenos en usufructo, lo que permite al consistorio intervenir sin asumir la propiedad.
En palabras de Pablo Novo, concejal de Obras, “hemos podido comenzar estas obras gracias a un acuerdo que también hemos catalogado de historia con la propia asociación de vecinos para la cesión en usufructo, no de propiedad, de las instalaciones de la finca, de los terrenos de la finca”.
El proyecto busca transformar el antiguo campo de fútbol en una gran zona jardinada, que contará con parque infantil, zona de suelta de perros y huertos urbanos. “La pretensión inicial es transformar el antiguo campo de fútbol para recuperarlo como lo que en su día fue esta finca, es decir, como una zona de esparcimiento, de convivencia comunitaria”, explica Novo.
Actualmente, los trabajos incluyen la instalación de cableado para la iluminación y la construcción de la red de riego, tanto por aspersión como por goteo, especialmente para los árboles frutales que se plantarán. Según el concejal, se trata de un guiño a la historia de la finca: “Los árboles frutales que se colocarán son un guiño precisamente a la toponimia de la propia finca, la Josa no deja de ser, o históricamente fue un espacio donde había muchos árboles frutales”. Además, se instalará arbolado de sombra que, con el tiempo, generará un bosquete urbano en una zona muy transitada.
La zona de suelta de perros, de 900 metros cuadrados, estará vallada y delimitada para evitar conflictos con otros usuarios del espacio. Novo asegura que las obras estarán finalizadas para las próximas fiestas navideñas: “Hombre, yo espero ya que nos estemos comiendo las uvas… con todo el terreno completamente transformado”.
El proyecto forma parte de una estrategia más amplia del Ayuntamiento, que incluye el plan Renaturaliza, con la instalación de jardineras con doble funcionalidad y la creación de pantallas verdes, como la de la calle Villalpando. Según Novo, estas intervenciones buscan “incrementar la superficie verde que tiene la ciudad, que siempre es algo que se percibe de forma muy positiva por los ciudadanos”.
Paralelamente, Zamora avanza con la rehabilitación de la muralla y nuevas obras urbanas, como la conexión de la alberca con Cardenal Cinero y la creación de siete pasos de peatones muy demandados. Según el concejal, todos estos proyectos forman parte de una política de transformación urbana que busca unir espacios históricos, movilidad sostenible y zonas verdes: “Para hilar un gran paseo verde que conecte con el pulmón de la ciudad”.
Las obras de La Josa representan un paso importante para que los vecinos puedan disfrutar de un espacio verde, funcional y comunitario, que combina historia, naturaleza y ocio en pleno corazón de la ciudad.
