La conservación del patrimonio histórico y cultural es una prioridad para la Diputación de Zamora, como lo demuestra la reciente restauración del retablo de la Iglesia Parroquial de San Miguel de la Ribera. Este proyecto, fruto de la colaboración entre la Diputación de Zamora y la Diócesis de Zamora, destaca la importancia de preservar aquellos bienes que, aunque no están oficialmente catalogados como monumentos, representan un valioso legado arquitectónico y artístico.
Un esfuerzo conjunto para conservar el patrimonio local
El vicepresidente primero de la Diputación de Zamora y diputado de Educación, Cultura y Turismo, Víctor López de la Parte, visitó el retablo restaurado junto al delegado de Patrimonio de la Diócesis de Zamora, Juan Carlos López, y la alcaldesa de San Miguel de la Ribera, Raquel Pascual Blanco. Este acto refuerza el compromiso institucional con la conservación de bienes muebles que, pese a no gozar de la protección legal como monumentos, son parte integral del patrimonio histórico de la provincia.
Víctor López de la Parte subrayó que la Diputación de Zamora continuará impulsando este tipo de proyectos, no solo en colaboración con la Diócesis de Zamora, sino también con la de Astorga, con el fin de garantizar la recuperación y conservación de bienes históricos que requieren atención, pero que no cuentan con los beneficios que la ley ofrece a los monumentos reconocidos.
Un patrimonio que merece ser conservado
El retablo de la Iglesia de San Miguel de la Ribera es un claro ejemplo de cómo el patrimonio arquitectónico y artístico de nuestras localidades puede perdurar gracias a esfuerzos de colaboración entre instituciones públicas y religiosas. Estas obras, que no siempre se encuentran en la lista de monumentos protegidos, forman parte del legado cultural de la provincia y deben ser tratadas con el respeto que merecen.
La restauración del retablo fue posible gracias al convenio de colaboración establecido para la restauración de bienes muebles. Este tipo de acuerdos son vitales para la preservación de elementos que, aunque no tengan una catalogación oficial, son parte esencial de la identidad cultural de Zamora y su entorno.
La importancia de proteger el patrimonio no monumental
No todos los bienes históricos cuentan con la protección que ofrece la legislación a los monumentos. Sin embargo, tal como destacó Víctor López de la Parte, “constituyen una importante parcela del patrimonio arquitectónico provincial merecedora de ser mantenida en buen estado de conservación”. Estos bienes, como el retablo de San Miguel de la Ribera, no solo embellecen los pueblos de la provincia, sino que también forman parte de su memoria histórica.
La Diputación de Zamora seguirá trabajando en esta línea, asegurando que las futuras generaciones puedan disfrutar y aprender de estos tesoros culturales que, aunque no oficialmente monumentales, son igual de valiosos.