La Plaza de la Madera de Benavente se convirtió este sábado en el corazón de todas las emociones deportivas al acoger la retransmisión de la final de la Copa del Rey. Numerosos vecinos y visitantes se dieron cita en este espacio para seguir el partido en una pantalla gigante instalada especialmente por el Ayuntamiento de Benavente para la ocasión.
Una final de infarto que se alargó hasta la prórroga
La emoción no tardó en apoderarse del ambiente. En un duelo lleno de tensión y alternativas, el partido se fue a la prórroga, alargando la expectación entre los asistentes y desatando celebraciones y lamentos a partes iguales. Cada gol fue vivido intensamente, con gritos, aplausos y alguna que otra lágrima en una plaza que latía al ritmo del fútbol.
Conciertos retrasados y opiniones divididas
Sin embargo, el alargamiento del partido afectó al programa musical previsto. El esperado concierto de La Fuga, uno de los grandes platos fuertes de la jornada, sufrió un retraso que generó ciertas molestias entre parte del público, especialmente entre quienes habían acudido exclusivamente por la música.
Las opiniones fueron diversas: algunos comprendieron el retraso debido a la importancia del evento deportivo, mientras otros mostraron su descontento por la alteración del horario.
Un ambiente único en una jornada para recordar
A pesar de las quejas puntuales, la Plaza de la Madera vivió una jornada inolvidable, demostrando una vez más su capacidad para ser punto de encuentro y celebración. Benavente vibró, sufrió, celebró y lloró los goles de una final de la Copa del Rey que quedará grabada en la memoria de todos los que la vivieron en directo.
