Este martes, el colegio San Vicente de Paúl de Benavente fue el escenario de una actividad única, organizada por el Plan Director de la Guardia Civil. Los alumnos vivieron una jornada llena de aprendizaje, sorpresa e ilusión, al conocer de cerca algunos de los medios con los que trabaja este cuerpo de seguridad.
Exhibición de drones
El evento comenzó con una impresionante exhibición de drones. Los niños, entusiasmados, miraban fijamente al cielo, donde los drones volaban realizando acrobacias. A través de una pantalla, observaban las imágenes del colegio y sus alrededores captadas desde el aire. La sorpresa fue mayúscula cuando reconocieron su propia escuela desde una perspectiva nunca antes vista. Después de varios vuelos, el drone aterrizó con precisión, dejando a todos los presentes con una gran sonrisa.
Demostración de los perros de la Guardia Civil
La siguiente parte de la jornada fue aún más emocionante: la esperada demostración de los perros de la Guardia Civil. Primero salió Aquiles, un perro conocido por su participación en otras exhibiciones. Aquiles, entrenado para la búsqueda de personas desaparecidas, sorprendió a todos al encontrar un juguete escondido en cuestión de segundos. Los niños aplaudieron y disfrutaron al ver cómo, después del hallazgo, Aquiles recibía su recompensa: un divertido momento de juego.
Luego, fue el turno de Puri, un Border Collie de gran destreza. Puri mostró su habilidad para buscar personas en situaciones difíciles, siguiendo con precisión el entrenamiento de su guía, el agente de la Guardia Civil.
El siguiente en mostrar su destreza fue Darko, un perro especializado en la detección de drogas. En un ejercicio impresionante, tres maletas fueron colocadas en diferentes puntos del patio. Darko, rápidamente, se dirigió hacia la maleta que contenía las sustancias prohibidas, demostrando lo eficaz que puede ser este tipo de entrenamiento.
A continuación, una perrita encargada de revisar bolsos, realizó una búsqueda más complicada. Entre muchos bolsos, Oca logró identificar el que contenía drogas, destacando la especialización de los perros para detectar sustancias ilícitas.
Interacción con los niños y actuación en situaciones extremas
En un momento especial de la jornada, se pidió la colaboración de los niños, y varios de ellos se ofrecieron con entusiasmo. Uno de ellos se escondió en una maceta, y un nuevo perro, también entrenado para estas situaciones, olfateó todo el patio hasta encontrarlo.
La exhibición culminó con una demostración de cómo actuarían los perros en una situación extrema. En este caso, un intruso armado fue interceptado por un perro, quien rápidamente le mordió hasta quitarle el arma, mostrando la capacidad de estos animales para proteger y neutralizar una amenaza.
Momentos de diversión con los vehículos y Aquiles
Al finalizar la exhibición, los niños vivieron uno de los momentos más esperados: pudieron subirse a los vehículos de la Guardia Civil. Entre risas y juegos, algunos niños tocaban las sirenas, mientras otros disfrutaban al máximo acelerando los vehículos. También se formó un corrillo alrededor de Aquiles, el perro más popular, al que los niños acariciaban con cariño. Incluso, uno de los agentes permitió que los pequeños jugaran con Aquiles y trataran de quitarle su juguete. En el primer intento, Aquiles ganó, pero en el segundo, una niña consiguió quitarle el juguete al perro, desatando una gran ovación.
Una jornada educativa y divertida
Sin duda, fue una jornada educativa y muy divertida, en la que los alumnos del colegio San Vicente de Paúl pudieron conocer de cerca el trabajo que realizan los agentes de la Guardia Civil con sus perros y drones.
