En Castilla y León se firmaron 21.367 contratos en agricultura durante los primeros siete meses del año, frente a los 25.835 registrados el año pasado, lo que se traduce en una caída del 17,3 por ciento, según un estudio realizado por la empresa de recursos humanos Randstad.
Así, se desprende que este descenso es 9,6 puntos porcentuales más moderado que la media nacional (-26,9 por ciento), mientras que el volumen de contratos registrado en Castilla y León supone el 2,1 por ciento del total que se han rubricado en España.
En lo que se refiere a provincias, los mayores volúmenes de contratos en agricultura tuvieron lugar en Valladolid (6.739), Segovia (3.894) y Burgos (3.106). Con volúmenes más moderados se encuentran León (1.757), Zamora (1.689), Soria (1.192), Ávila (1.175), Salamanca (975) y Palencia (840).
Los descensos más moderados tuvieron lugar en Zamora (2,1 por ciento), Palencia (9,6 por ciento), Segovia (10,1 por ciento), Valladolid (15,9 por ciento). Las siguen, con caídas más acusadas, León (17,7 por ciento), Soria (20,8 por ciento), Burgos (26,5 por ciento), Ávila (27,4 por ciento), Salamanca (27,9 por ciento).
En el conjunto del país, la agricultura ha generado 1.002.867 contratos en lo que llevamos de año, de los cuales el 52 por ciento corresponden a indefinidos (521.609) y el 48 por ciento restante, de duración determinada (481.258).
El volumen de este año es un 26,9 por ciento inferior al de los siete primeros meses de 2022, aunque los contratos indefinidos se han incrementado en este 2023 un 36,2 por ciento.
De hecho, el pasado año, los contratos indefinidos apenas suponían el 28 por ciento, mientras que actualmente ya superan la mitad del volumen total.
