
La alerta amarilla por nieblas en Zamora se mantiene activa durante la jornada de este sábado debido a la presencia de un banco de niebla persistente que afectará especialmente a la meseta zamorana. Según la previsión oficial, la visibilidad puede reducirse de forma notable durante la madrugada y primeras horas del día, llegando en momentos puntuales a marcar menos de cien metros, una situación que complica la circulación y obliga a extremar la precaución en desplazamientos por carretera.
La combinación de humedad, bajas temperaturas y estancamiento del aire favorece la formación de niebla densa que, en algunos casos, podría venir acompañada de heladas débiles o cencellada en superficies expuestas. Esto significa que tanto conductores como peatones pueden encontrarse con tramos resbaladizos, barandillas heladas o vehículos cubiertos por una fina capa de hielo. Aunque estos fenómenos no alcanzan niveles de gravedad extrema, sí representan un riesgo añadido para la movilidad y las actividades al aire libre.
Desde primera hora de la mañana se recomienda reducir la velocidad, aumentar la distancia de seguridad y circular con las luces adecuadas, evitando usar las largas, ya que pueden reflejarse en la niebla y disminuir aún más la visibilidad. En zonas rurales, caminos secundarios y accesos a pequeños núcleos de población, estas condiciones suelen intensificarse, por lo que se aconseja evitar desplazamientos innecesarios hasta que la masa de niebla empiece a disiparse.
Está previsto que la situación mejore a medida que avance la mañana, aunque no se descarta que algunos puntos de la provincia mantengan nieblas persistentes de carácter local. La recomendación general es mantenerse informado de la evolución meteorológica y actuar con prudencia mientras dure el aviso. Las condiciones actuales recuerdan la importancia de prestar atención a la climatología invernal, especialmente en días en los que la niebla se convierte en la protagonista del panorama provincial.






