
El Mercado de Abastos de Zamora avanza en su transformación con un nuevo impulso económico por parte de la Junta de Castilla y León. El alcalde, Francisco Guarido, y la consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, confirmaron hoy la aprobación de otros 800.000 euros que se suman a la primera subvención ya concedida, alcanzando así 1,6 millones de euros en ayudas directas.
Guarido destacó que la remodelación es “una obra importantísima en el ayuntamiento y en el contexto de la ciudad”, recordando que los trabajos ya cumplen un año y están ejecutados al 60%. Según explicó, se han certificado 2,8 millones de euros y restan 1,8 millones para completar la actuación. El alcalde remarcó que el proyecto “va muy bien”, aunque admitió que las excavaciones arqueológicas han añadido complejidad: “Debajo del mercado había una iglesia y cementerios alrededor, y todo eso nos obliga a prolongar un poco la obra”.
La consejera Leticia García anunció que mañana el Consejo de Gobierno aprobará la segunda partida de 800.000 euros, cumpliendo el compromiso adquirido con la ciudad. “La Junta colabora con 1.600.000 euros en esta importante inversión”, afirmó, subrayando que los mercados municipales son “claves para el éxito del comercio de proximidad”. También recordó que su consejería ha invertido 5,5 millones en Zamora durante la legislatura.
Guarido explicó que, pese a los hallazgos arqueológicos, la obra no se detendrá y podría prolongarse “dos o tres meses más”. En sus palabras: “En una obra de seis millones de euros, contar con unos meses más era algo que dábamos por descontado”. El regidor considera un éxito poder finalizarla en octubre de 2026, aunque el plazo inicial marcaba el verano de ese mismo año.
El Ayuntamiento trabaja ya en los pliegos de concesión para los futuros puestos, que rondarán los 35, incluyendo algunos de restauración. Guarido recordó que los puestos anteriores “tenían dimensiones raquíticas”, mientras que ahora deben cumplir los mínimos exigidos. Además, confirmó el interés creciente de comerciantes locales: “Hay una tensión positiva en la ciudad; ya están llamando al Ayuntamiento preguntando por los puestos”.
Sobre las condiciones económicas de acceso, fue claro: “Queremos que el canon y la renta sean lo mínimo posible, pero nadie puede hacer competencia desleal; quien entre en el mercado tendrá que pagar una renta razonable”.
Tanto el Ayuntamiento como la Junta coincidieron en la relevancia del proyecto para dinamizar el comercio local, mejorar la oferta del centro urbano y recuperar un edificio emblemático con más de 120 años de historia.






