El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha hecho un nuevo llamamiento con ruego incluido al Gobierno de la nación para que de la mano de las comunidades autónomas lidere y coordine una postura común ante la Semana Santa.
«A problemas comunes, respuestas comunes», ha reclamado el presidente de la Junta quien no ha ocultado su inquietud ante la posibilidad de que haya una dispersión de respuestas por parte de las comunidades autónomas.
No obstante y preguntado en concreto por la postura de la Comunidad de Madrid partidaria de relajar las restricciones de movilidad y de abrir, Fernández Mañueco ha zanjado el asunto con un «cuando se produzca hablaremos de ello» para reiterar su exigencia al Gobierno para que lidere esta cuestión y garantizar al Ejecutivo central que va a contar «siempre» con la lealtad de la Junta de Castilla y León.
Fernández Mañueco ha abogado en todo momento por diseñar un plan nacional que fije cómo actuar en Semana Santa y se ha mostrado confiado en el trabajo de la ministra de Sanidad, Carolina Darias, y de los respectivos consejeros para que lleven a cabo ese trabajo. «La consejera –Verónica Casado– sabe lo que hay que hacer, confío en ella», ha añadido.
El objetivo, ha reiterado, es evitar que haya 17 niveles en la desescalada, por lo que ha insistido en la necesidad de que el Gobierno haya un «mayor esfuerzo» para conseguir una estrategia común que se podrá adaptar no obstante a las circunstancias y a las peculiaridades de cada territorio ya que, según ha evidenciado a modo de ejemplo, a Canarias sólo se puede llegar por barco o por avión mientras que a Castilla y León se puede llegar de muchas formas. «Por barco no», ha ironizado.
