“Mentiras, ausencias y cenizas”: Pedro Sánchez critica la gestión de los incendios en Castilla y León

El presidente del Gobierno denuncia recortes y falta de prevención frente a los incendios que arrasan la región.

En un reciente discurso parlamentario, Pedro Sánchez, presidente del Gobierno de España, lanzó duras críticas contra la gestión de los incendios en Castilla y León por parte del Ejecutivo autonómico. El mandatario puso el foco en la falta de prevención y en la desastrosa gestión forestal que ha marcado los últimos años en la región.

Un historial preocupante de incendios

Sánchez recordó que la región ha sufrido graves incendios en los últimos años:

  • En 2022, ardió la Sierra de la Culebra.
  • En 2024, los montes de Astorga se vieron afectados.
  • En 2025, las Médulas fueron pasto de las llamas.

En todos estos casos, el presidente criticó la ausencia de autoridades locales, señalando que ni siquiera estuvieron presentes en muchos de los lugares afectados.

Recortes en inversión y privatización de bomberos

El presidente destacó que el Gobierno autonómico redujo en un 20% la inversión pública en protección forestal, mientras que el 40% de los servicios de bomberos fueron entregados a empresas privadas. Además, Sánchez denunció la temporalidad en los sistemas de prevención y vigilancia, algo que, según él, evidencia una gestión negligente:

«Mantener un dispositivo antiincendios todo el año es absurdo y un despilfarro», habría declarado un consejero regional.

Responsabilidad y falta de prevención

Sánchez criticó que, frente a estas catástrofes, las autoridades locales primero negaron toda responsabilidad, luego culparon al Gobierno de España y finalmente afirmaron que no se estaba haciendo nada, a pesar de que la UME y el Ministerio de Transición Ecológica trabajaron activamente en los incendios desde finales de julio.

El presidente enfatizó el impacto devastador: más de 56 millones de árboles calcinados, además de casas, granjas y negocios de cientos de castellanos y leoneses.

Conclusión

El mensaje de Pedro Sánchez fue claro: mentiras, ausencias y cenizas. La falta de inversión, la privatización de servicios y la gestión irresponsable han dejado a Castilla y León vulnerable frente a los incendios, a pesar de que el Gobierno central ha aumentado en un 50% la inversión en prevención y gestión forestal.

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