«No ha sido la COVID, no», explican desde el Movimiento por la Sanidad Pública de Zamora. Desde la plataforma refieren que la sanidad pública se encuentra «en coma inducido». A través de un comunicado remitido advierten de la actual situación en que se encuentra la Sanidad, en referencia a la Atención Primaria y la Atención Especializada que «sucumben ante la estrategia política de recortes que generaron escasez de recursos económicos y falta de profesionales».
Se reproduce íntegro el comunicado remitido a los medios:
El Movimiento en Defensa de la Sanidad Pública de Zamora está asistiendo durante todo el verano con verdadera satisfacción a las numerosas manifestaciones, recogida de firmas y otras iniciativas de todo tipo, promovidas por Plataformas Rurales, Asociaciones Culturales, Ayuntamientos, Mancomunidades y Asociaciones del propio Movimiento, ante la falta de asistencia presencial en los consultorios de sus pueblos.
Igualmente hemos comprobado que, frente al silencio de los profesionales de la sanidad, este verano, han confirmado en muchos casos las denuncias de sus pacientes, incluso han constituido plataformas en su propia defensa.
No podemos distraernos en los problemas derivados del Covid, argumento utilizado por la Consejería de Sanidad y el Gobierno de la Junta de Castilla y León para encubrir el déficit estructural de personal que arrastramos desde hace varios años y hacer así efectiva su estrategia programada de desmantelamiento de la Atención Primaria de Salud y del aumento exponencial de las listas de espera ante el olvido de la resolución de los problemas de salud ordinarios (como ejemplo 1 año para hacer una colonoscopia o 14 meses para una consulta de traumatología). La promoción de la salud, la prevención de la enfermedad y la asistencia presencial ante la enfermedad, han pasado al olvido, solo nos queda la atención telefónica y eso cuando la tecnología y personal lo hacen posible.
El desmantelamiento que se está llevando a cabo es totalmente injustificado, dadas las necesidades sanitarias de los ciudadanos del mundo rural, debido a su dispersión, su envejecimiento y la cronicidad de sus enfermedades y que se evidencia con las falsedades que instrumentalizan sus promotores (en nuestra región el Partido Popular y Ciudadanos), pues pese a jurar defender la Sanidad Universal, no les gusta el modelo, sobre todo cuando la diferencian según el lugar en el que viven las personas, mundo rural-mundo urbano. Y mienten ante la opinión pública y en sede parlamentaria cuando aprueban abrir los Consultorios rurales, mientras la Consejera de Sanidad y médica, remite a las Gerencias Territoriales las condiciones de apertura que hacen inviable el mandato parlamentario. Y por si fuera poco se mantienen en la mentira tanto ella como el Presidente de la Junta, diciendo: «los consultorios no están cerrados». Las concentraciones a las puertas de los Consultorios han visualizado gráficamente los avisos y cintas de cierre colocados en sus puertas que impiden el paso a los ciudadanos.
Para lavar su mala conciencia la Sra. Consejera que sabe que no hay acto médico sin la asistencia presencial del paciente, a lo más que llega es a admitir que “la consulta telefónica es un poco complicada». ¿Por qué entonces mantiene la consulta telefónica? ¿Ese es el concepto de asistencia sanitaria que tiene la que fue mejor médica del mundo? ¿Y por cuánto tiempo la mantendrá?
Dice ahora el Presidente de la Junta que “el problema esta en la falta de profesionales” y no le falta razón. Se da cuenta ahora, en el año 2020, cuando desde el Movimiento y desde las distintas Plataformas Regionales hemos venido alertando desde el año 2014 de la situación de futuro que generarían las políticas de recortes y de imprevisión de la gestión sanitaria que se estaba llevando a cabo en la Consejería de Sanidad, porque la incorporación de profesionales (de todas las categorías) no cubría ni las plantillas orgánicas, porque se suprimían plazas en base a la disminución de la población del mundo rural y porque no se acometía una gestión de previsión para la ingente cantidad de jubilaciones que se preveían a partir del año 2016. También alertábamos de que la situación si no se acometía un pacto por la sanidad para solventar este problema generaría el desmantelamiento de la atención sanitaria digna y de calidad que hemos conocido. Y es donde estamos ahora, se acabo la asistencia presencial en el mundo rural por falta de profesionales, solo les queda el recurso de la atención telefónica, amparándose en el Covid.
En este caos en que se mueve la Sanidad Pública de Castilla y León le han entrado prisas a PP y CS por sacar adelante la Reforma de la Sanidad Pública en nuestra Comunidad y a tal efecto se ha creado un grupo de expertos que retoma su trabajo de nuevo en Septiembre.
La verdad es que a estas alturas y con el problema tan grave que tenemos generado por su pasividad en la toma de decisiones, nos soliviantan estas prisas, no parece lo más aconsejable en este momento dada la inutilidad de la gestión sanitaria seguida hasta ahora por estos partidos. Nos retumban todavía las palabras de la Consejera de Sanidad anunciando en enero de 2020 un gasto por encima de presupuesto de 1.200 millones de euros; del desfase en el gasto a estas alturas tras estos meses de pandemia no ha vuelto a informar, pero podemos imaginarnos la situación económica de la Consejería.
Ahora el Presidente quiere arreglarlo por la vía de urgencia con los 250 millones de euros que se asignaron en el Pacto de reconstrucción regional, parece escaso para saldar las deudas y acometer el objetivo que se han propuesto de reforzar la Atención Primaria, mas bien y despues de escuchar las palabras del Sr. Igea en agosto a cerca de las conclusiones de la Comision, nos ha dado una pista por donde se encaminarán estas: supresión de plazas de profesionales, supresión y eliminación de las visitas presenciales en los consultorios y concentración de profesionales en centros de salud de acuerdo con los ratios de población que se establezcan, o sea, firmaran el finiquito de la sanidad pública tal y como la conocemos en el mundo rural.
Las peores previsiones que anunciamos en el año 2014 ante la estrategia programada por la política de recortes sanitarios del Partido Popular y que ahora también ha asumido Ciudadanos, se están haciendo realidad.
