Al alcalde de Santa Cristina de la Polvorosa, Salvador Domínguez, no le duelen prendas denunciar actos incívicos de sus convecinos. No es la primera vez.
En esta ocasión y a través de un bando el alcalde expresa su satisfacción por el hecho de que los quintos del 73, con motivo de su fiesta que se celebra al ocaso de este viernes, en lugar de izar la viga, el chopo talado del plantío, planten un árbol. «Queremos este año plantar un árbol, en vez de tirarlo», le comunicaron hace unos días y el hecho le pareció «una idea fantástica» y por ello les daba las gracias, porque su árbol perdurase en el tiempo.
Sin embargo, una buena noticia suele ir aparejada con otras no tan buenas y eso le ocurría a los pocos días al alcalde. La sorpresa de Salvador Domínguez fue mayúscula ayer mismo, en la mañana de este jueves 10 de agosto, cuando el encargado de servicios del Ayuntamiento le comunicaba que habían volcado un contenedor de basura, habían arrancado el contenido de una maceta al completo y que a los árboles junto al parque de los niños le habían quitado los tirantes instalados para que el viento no los venciera y los partiera, «estaban totalmente en el suelo», le decía el empleado municipal.
Pero lo que más le dolió al alcalde, según ha manifestado públicamente a sus convecinos, fue que uno de los árboles que se alzaba junto a la fuente de chorros en la plaza de la parte trasera de la iglesia, recién urbanizada, fuera talado a ras del suelo.
«Mi cabeza no me da más, no abarca asumir tanta maldad, las personas que han decidido hacer esta salvajada solo espero que no sean vecinos del pueblo, de lo contrario como dije: ni al más tonto se le ocurre hacer esto en su casa», aseveró con rotundidad el alcalde de Santa Cristina de la Polvorosa.
Es que hay mucho tonto en Santa Cristina