La tranquilidad del barrio de San Isidro se ha visto gravemente afectada tras la ocupación ilegal de una vivienda situada en la calle La Zarza, número 49. La casa, propiedad de una vecina del municipio, fue ocupada en la madrugada del 18 de junio de 2023, cuando un grupo de personas forzó las puertas del garaje para acceder al interior del inmueble.
Según informaron los vecinos, un fuerte golpe alertó a la comunidad, pero cuando se percataron de lo sucedido, los ocupantes ya se habían instalado en la vivienda. La ocupación se confirmó oficialmente el 20 de junio, cuando la Guardia Civil de Benavente contactó con la propietaria para informarle de la situación. Cabe destacar que la familia había estado en la casa apenas tres días antes del suceso, el 17 de junio.
Un proceso judicial lento y sin garantías para los propietarios
Desde el momento en que se produjo la ocupación, la familia ha intentado recuperar la vivienda por la vía legal. Sin embargo, el proceso judicial ha resultado ser extremadamente lento y complicado. Tras intentar una denuncia por la vía penal sin éxito, la vía civil se ha convertido en la única alternativa, aunque el proceso está encontrando trabas debido a los recursos presentados por los ocupantes.
La situación está afectando gravemente a la propietaria, quien ha experimentado episodios de ansiedad y pérdidas de memoria debido al estrés generado por este conflicto. Además, la vivienda ha sido severamente dañada en su interior: cristales rotos, instalaciones manipuladas y el robo de muebles, enseres y recuerdos de valor sentimental.
Un problema creciente en el barrio
Los vecinos también han manifestado su preocupación ante la falta de seguridad en la zona. Desde que la casa fue ocupada, se han producido incidentes como el ingreso de personas ajenas por las ventanas, algunos de ellos presuntamente vinculados con el consumo de drogas. Además, la familia propietaria denuncia que al menos dos grupos de okupas han pasado por la vivienda. Los okupas que están viviendo en la casa actualmente tienen antecedentes penales y procesos judiciales pendientes. Actualmente, permanecen en la vivienda, pero están pendientes de entrar en la prisión. Se trata de los responsables de un robo con intento de homicidio en Benavente, donde un joven fue apuñalado con un punzón o un puñal. Como consecuencia de este delito, él ha sido condenado a diez años de prisión y ella a cinco
Uno de los episodios más indignantes se produjo cuando los okupas intentaron negociar la venta de la llave de la casa a los propietarios, pidiendo primero 500 euros y luego reduciendo la cifra a 200 euros.
Una llamada a las autoridades por los okupas
Ante la desesperación, los vecinos han presentado un escrito al Ayuntamiento de Benavente exigiendo mayor presencia policial y una solución rápida a este problema. Sin embargo, hasta el momento no han recibido respuesta.
«Nos sentimos desprotegidos. Parece que la ley está del lado de los okupas y no de los propietarios», lamenta la familia afectada. «Los vecinos tienen miedo. Esta vez nos ha tocado a nosotros, pero podría pasarle a cualquiera», ha declarado el hijo de la propietaria a Benavente Digital.
Se espera que el Juzgado de Benavente agilice el proceso para devolver la vivienda a sus legítimos dueños y que las autoridades tomen medidas para garantizar la seguridad en la zona. Mientras tanto, la familia sigue esperando una solución a un problema que ya ha afectado gravemente su bienestar emocional y patrimonial.
