Año tras año, una abultada cabaña ganadera de ovino enfila el cordel sanabrés desde tierras alistanas y charras para llegar a los generosos pastos de Puente Porto, en la Sierra Segundera. La trashumancia se hace efectiva anualmente a primeros del mes de julio, aunque en esta ocasión, como ha sucedido en años anteriores, se ha realizado ya en la segunda quincena del mes. Y todo ello, debido a que los pastos del sur de la provincia han guardado con persistencia su frescor.
La característica estampa pastoril llegaba a primera hora de la mañana de este martes 20 de julio a la villa de Puebla de Sanabria cruzando el Arrabal y el puente de San Francisco sobre el río Tera. Todo un atractivo turístico que no deja indiferente a nadie al ver pasar la riada. Instantáneas fotográficas y selfies se confunden con la espectacular alfombra de lana.