En el día de ayer miles de litros de agua fueron a parar al alcantarillado público, como consecuencia de la rotura de una de las tuberías utilizadas para regar la plantación de vides en los cuestos de la Mota.
El agua, que corría abundantemente por la zona afectada, estuvo vertiéndose durante gran parte de la mañana. El incidente se corregía gracias a que un operario de jardines se percató de lo que estaba sucediendo,y cortó el agua en la zona.
Se da la paradoja de que mientras se vierten miles de litros de agua en los cuestos, se dejan secar otras zonas ajardinadas de Benavente, como la existente en la Avenida Maragatos, donde estos días salían a refrescarse a la sombra algunos vecinos de la zona, que criticaban el estado en el que se encuentra el césped por falta de mantenimiento.