El campamento urbano de Benavente vivió este jueves una jornada especial dedicada al Toro Enmaromado, la fiesta más emblemática de la localidad. El concejal de Fiestas, Alberto Lorenzo, se acercó hasta el recinto para explicar a los más pequeños el significado, las normas y los valores que rodean a esta tradición centenaria.
La actividad combinó teoría y práctica. Primero, Lorenzo ofreció una charla divulgativa en la que los niños, muy atentos, aprendieron no solo el desarrollo del festejo, sino también aspectos esenciales como el cuidado al animal, el lenguaje propio de la carrera y el trabajo en equipo que implica agarrar la maroma.
“Hay que sentirse orgullosos porque continuamos defendiendo nuestro toro, nuestro festejo, nuestra tradición, nuestra fiesta”, expresó el concejal durante su intervención.
Los niños escucharon, preguntaron e incluso lanzaron preguntas. Después, corrieron por edades junto a Lorenzo, recreando el encierro con un carretón facilitado por la Asociación Benaventana del Toro Enmaromado (ABTE). No faltaron los gritos de “¡Toro, toro!” ni una bomba improvisada que marcó la salida de las pequeñas carreras.

Para Alberto Lorenzo, la jornada fue una muestra de que el trabajo en la divulgación está dando sus frutos:
“Cuando el día de mañana corran el toro, se acordarán de pautas como la de soltar la maroma o cómo actuar en momentos clave”, explicó. “Lo importante es que comprendan el sentido de la fiesta y que lo transmitan”.
La jornada concluyó con una gran ovación, una foto final de grupo y con el capote del pequeño Mateo, quien sorprendió a todos demostrando su destreza con algunos lances.







