UNIVERSIDAD DE VALLADOLID F.S 5.- Nacho Pirin, Adri, Muñoz, Balle y Taveras. También jugaron, Raulito, Miguelín, Picolo, Dani Martín y David.
DESGUACES CASQUERO 5.- Tomy, Javi Cala, Álex, Malaguti y Samu. Luego jugaron, Charlie, Zorro, Josico, Arafa, Ito, Christian y Mañanes.
Árbitro.- Molina Muñoz y Prieto González. Amonestaron a los locales Dani Martín y Taveras y a los benaventanos Malaguti, Josico, Christian, Tomy y Álex.
Goles.- 0-1 Javi Cala (2´), 1-1 Christian en pp (8´), 2-1 Adri (9´), 3-1 Miguelín (11´), 4-1 Picolo (13´), 4-2 Malaguti (14´), 4-3 Javi Cala (24´), 5-3 Balle (25´), 5-4 Arafa (32´), 5-5 Malaguti (37´).
Arrancaba bien el Desguaces Casquero el encuentro que le enfrentaba al siempre correoso Universidad de Valladolid, aunque como muchos de la categoría, muy benaventano. Javi Cala había hecho que casi desde el túnel de vestuarios su equipo saliera con un gol bajo el brazo ya que a los dos minutos de juego había logrado batir al meta Pirin. Lo estaba intentando el equipo de Miguel Ángel Macías desde el inicio el poder sorprender a los universitarios con un juego rápido y lo estaba consiguiendo.
Todo iba sobre ruedas para los benaventanos hasta que un nuevo tanto en propia puerta a los ocho minutos, cuando Christian intentaba despejar un balón, desestabilizaba al equipo y era el conjunto local el que tomaba la iniciativa en lo que pareció ser el camino bueno que le llevara a la victoria. Los chatarreros habían perdido el rumbo inicial y en cinco minutos los locales habían conseguido, casi, amarrar el partido colocándose con el 4-1 en el minuto 13 de la primera mitad. Adri, Miguelín y el benaventano Picolo habían conseguido, no solamente dar la vuelta al marcador, sino que tomar una ventaja que parecía ser buena.
Tan sólo un minuto después del tanto de Picolo, Malaguti hacía el segundo del Desguaces Casquero que permitía volver a tomar aire y esperar al descanso para intentar ser, ahora, el cuadro blanquiazul el que cambiara los papeles.
Y casi fue así, pues cuando el cronómetro señalaba el cuatro de la reanudación Javi Cala volvió a ser el más madrugador para acercar el marcador y pasarle la presión a los vallisoletanos. Poco les duró esa presión pues en el 25 llegaba el 5-3 obra de Balle que ya parecía insalvable. Los benaventanos sacaron fuerzas de flaqueza y siguieron creyendo en sacar algo positivo obligando a los locales a cometer muchos errores que aprovechaban Arafa y Malaguti para cerrar el empate a falta de tres minutos para el final.
No pasaba nada más en estos tres minutos y el marcador repartía puntos para ambos conjuntos donde ninguno de ellos salía contento con lo que pudo ser y no fue.