Ayer al mediodía, en torno a la 14:00 horas, la Guardia Civil de Benavente acudía a un bar de la localidad alertada por el encargado del establecimiento. Un hombre, de aspecto corpulento, llevaba varias horas jugando a la máquina tragaperras y había introducido una buena suma de dinero en ella. Ante la negativa de la máquina de darle el premio, el jugador no dudó en responder por la fuerza hasta dejarla totalmente desvalijada.
Según ha contado el encargado del establecimiento a este medio, el hombre muy enfadado le dijo «el dinero me lo llevo». El primero, que ejercía en ese momento las labores de camarero, se ausentó de la barra para avisar a las autoridades, ante la posibilidad de que el individuo cogiera el dinero de la caja registradora a la fuerza, en total 800 euros.
En ese momento el jugador cogió el extintor de incendios del bar y comenzó a propinarle golpes a la máquina tragaperras hasta llegar al cajetín del dinero, no sin antes haber amenazado al propio encargado con este objeto convertido en arma.
Testigos del suceso coinciden en que este individuo es reincidente en este tipo de actos vandálicos.