A las seis de la tarde de este martes se celebró en la iglesia de Morales de Rey la misa por el eterno descanso de Monseñor Rafael Palmero Ramos, obispo emérito de la Diócesis de Orihuela-Alicante, fallecido el pasado 8 de octubre a los 84 años de edad. El Obispo de Astorga, Mons. Jesús Fernández, presidió la Eucaristía en el templo parroquial de Morales de Rey, la localidad natal del prelado fallecido y de la que era hijo predilecto.
Ayer lunes se había celebrado en la Catedral de Astorga una misa por el obispo Rafael Palmero, presidida también por el pastor de la iglesia asturicense, monseñor Jesús Fernández.
La solemne y emotiva ceremonia religiosa en el templo de San Pelayo de Morales de Rey, edificio que fuera ampliado siendo prelado el ahora fallecido, contó con una docena de concelebrantes y una nutrida representación de vecinos, entre los que se encontraba una hermana de mons. Rafael Palmero. Junto al pastor de la iglesia asturicense, el prelado Jesús Fernández, se encontraban el arcipreste de los Valles-Tábara, Baltasar Villalón, el vicario general, José Luis Castro y los presbíteros Carlos Fernández, Luis Rubio Morán, Lope Rubio Parrado, Arturo Cabo (El Salvador de La Bañeza), Ángel Matilla (condiscípulo del prelado fallecido y párroco de Villarejo de Órbigo), Augusto Machín (natural de Morales de Rey), Cristopher Vázquez, Tarsicio (ejerció su ministerio pastoral en Venezuela), así como el párroco José María Vecillas quien actuó como maestro de ceremonias.
Monseñor Jesús Fernández finalizaba su homilía glosando la figura humana y del eclesiástico Rafael Palmero Ramos, del «pastor bueno y fiel, hijo de esta parroquia de Morales de Rey».
