El Día mundial de los animales se celebra cada año el 4 de octubre, una fecha promovida por la Organización Mundial de Protección Animal, con el objetivo de frenar la extinción de muchas especies. Se eligió este día en conmemoración de San Francisco de Asís, considerado como el primer ser humano que se concibió a si mismo en relación con todas las cosas creadas, y que consideraba, sin importar la diferencia, que todos somos criaturas de Dios.
Fue en el año 1980 cuando el papa Juan Pablo II declaró a San Francisco de Asís patrono de los animales y de los ecologistas, momento a partir del cual esta celebración tomó más auge a nivel mundial, encontrando lugar en muchos países con la “bendición de las mascotas”. El propósito central de esta fecha es recordar la importancia de las especies animales con quienes compartimos el planeta y con frecuencia son víctimas del egoísmo, sadismo y crueldad humanos. Sin embargo, a través de la educación y la difusión de las actividades de los defensores de los animales, se intenta crear una nueva cultura del respeto y sensibilidad, causa que cada vez suma más gente que busca hacer de este mundo un sitio más justo para todos sus habitantes.
