La Dirección General de Tráfico registró más de 70 millones de denuncias en los últimos 20 años. Durante dicho periodo la recaudación fue de 6.500 millones de euros, un aumento del 90% respecto a periodos anteriores. Las sanciones interpuestas se incrementaron un 122% durante estas dos décadas, sin embargo el parque automovilístico solo creció un 40% en comparación. A lo largo del siglo el régimen sancionador se ha hecho más eficaz, pasando de 2,1 millones de denuncias en 2001 a las 4,7 millones de sanciones en 2019.
Según los datos recabados por Automovilistas Europeos Asociados (AEA), los recursos planteados ante estas multas por los conductores han caído en picada desde la reforma de la Ley de Seguridad Vial en 2009. Desde entonces un 64% de conductores se adhieren a la fórmula de pronto pago.
Sin embargo, este mismo informe precisa que los tribunales de justicia en España están dando la razón a los sancionados en uno de cada dos recursos, sobre todo en las multas que se interponen por excesos de velocidad “porque no se está aplicando correctamente el margen de error en los radares”. De esta manera, en los últimos tres años un 50% de las denuncias han sido anuladas por la Justicia.
