La Agencia de Protección Civil y Emergencias de la Junta de Castilla y León ha declarado la alerta en todas las provincias de la Comunidad debido a la previsión de fenómenos meteorológicos adversos. A partir de las 12:00 horas de hoy, se esperan intensas lluvias, nevadas y vientos fuertes que afectarán a la región. La alerta permanecerá activa hasta nueva notificación, dependiendo de la evolución de las condiciones.
Fenómenos meteorológicos adversos
Este episodio meteorológico se debe a la presencia de una borrasca atlántica situada al noroeste de la Península, que traerá consigo precipitaciones generalizadas y vientos localmente intensos en Castilla y León. Además, se espera la entrada de frentes atlánticos que provocarán precipitaciones persistentes, con acumulados de hasta 80 mm en 12 horas en el Sistema Central. Las temperaturas también sufrirán un descenso, lo que situará las cotas de nieve entre los 1.100 y 1.300 metros en las zonas montañosas.
Esta situación de inestabilidad atmosférica se prolongará durante los primeros días de la próxima semana, aunque se espera una pérdida de intensidad y un descenso en la velocidad de los vientos a medida que avance el episodio. Además, el aumento de las precipitaciones podría ocasionar un incremento de los caudales de los ríos.
Recomendaciones de seguridad
La Agencia de Protección Civil y Emergencias ha emitido una serie de recomendaciones para la ciudadanía:
- Si tiene previsto circular por carretera, se aconseja consultar el estado de las vías a través de la Dirección General de Tráfico o la Junta de Castilla y León, así como el teléfono de información 011. Además, se recomienda conducir con el depósito lleno, cadenas o neumáticos de invierno, y llevar un teléfono móvil con la batería cargada, ropa de abrigo y algo de comida y bebida.
- Se desaconseja la práctica de actividades al aire libre debido al riesgo de accidentes, aislamiento o desorientación en zonas de difícil acceso, cuyo rescate podría verse dificultado por las condiciones meteorológicas.
- Las personas que residan cerca de ríos cuyo nivel esté aumentando considerablemente deben mantener una vigilancia activa y tomar medidas de autoprotección, como mover los vehículos a zonas más altas o evitar las calles inundables.
En caso de emergencia, al llamar al 1-1-2, es fundamental proporcionar información clara sobre el lugar exacto de la emergencia, las condiciones meteorológicas y las dificultades de acceso en la zona.
La Agencia de Protección Civil recomienda extremar la precaución y seguir las indicaciones de las autoridades ante la situación de alerta.
