Este año y debido a la situación sanitaria por culpa de la pandemia, las mascotas de San Antón recibirán su bendición desde la iglesia. Los animales tendrán que esperar a otro año para acudir hasta las puertas del templo y ser rociados con el agua bendita.
La familia Sobejano como mantenedora de una tradición de 131 años en Santa Cristina de la Polvorosa, al menos desde el año 1890 en que se constituía la cofradía de San Antonio Abad, continúa con los actos religiosos en honor del aureolado patrono de los animales. En Santa Cristina de la Polvorosa se celebra desde este viernes, a las 19:00 horas, un Tríduo previo a la misa festiva del domingo 17 de enero prevista para las 12:30 horas.
De esta fiesta de San Antonio o de San Antón, el 17 de enero, se tienen referencias desde el año 1890 como se da testimonio en la vara que porta en los actos religiosos un miembro de la familia Sobejano. Primeramente fue Francisco, el bisabuelo de los actuales representantes de la saga, después el abuelo Justiniano, para pasar el testigo a Francisco el padre de los actuales organizadores, quienes vienen cumpliendo con la antigua tradición familiar.
Todo apunta a que el abuelo Francisco se encargase de dedicarle todos los honores al santo eremita y patrón de los animales, debido a la arraigada devoción que le profesaba a este santo. El precursor del festejo, además de los animales propios para realizar las labores del campo, tenía también ovejas. Agricultura y ganadería que se han venido compatibilizando en esta familia de Santa Cristina desde entonces.
