La situación en la vivienda de la calle La Zarza, 49, en Benavente, que desde junio de 2023 sufre la ocupación ilegal de diversos grupos, se ha tornado aún más alarmante. Según informaciones recientes, aportadas a Benavente Digital, la propiedad, que había sido ocupada por individuos con antecedentes penales, ahora ha pasado a estar «ocupada» por los perros de los últimos okupas. Estos entran y salen de la vivienda a su antojo, pero ya no viven allí. Según vecinos de la zona, han cortado la conexión con la red eléctrica, que anteriormente tenían pinchada desde el alumbrado público.
Sin embargo, los problemas persisten, ya que la casa sigue siendo utilizada por otras personas que, según los vecinos, se cuelan por las ventanas para consumir drogas. La situación ha desbordado la paciencia de los residentes de la zona.
El hijo de la propietaria ha informado que, aunque la vivienda ya no está habitada por los okupas principales, la propiedad continúa siendo un punto de conflicto, dado que la casa sigue siendo utilizada de manera ilegal.
Además, según fuentes policiales, los primeros okupas que tomaron la vivienda tenían una orden de desahucio pendiente. Sin embargo, al «cederles» la propiedad a un nuevo grupo de okupas, el hijo de la propietaria se ha visto obligado a reiniciar todo el proceso judicial desde cero. Esto ha alargado aún más la batalla legal por la recuperación de la vivienda, haciendo que la situación sea cada vez más desesperante para la familia afectada, que continúa luchando por recuperar lo que les pertenece.
Se espera que, con la intervención de la justicia, la situación se resuelva pronto, pero por el momento, los vecinos siguen exigiendo más acción para garantizar la seguridad y el bienestar de la comunidad.
