La sesión extraordinaria celebrada esta mañana en el Ayuntamiento de Arrabalde ha dejado tintes rocambolescos e invadidos por el tono bronco. El Pleno convocado para las 13:30 horas con el plato fuerte de la renuncia del popular Felipe Martín a la alcaldía y a su acta de concejal se llegó a celebrar, aunque sin la renuncia del primer edil porque éste unas horas antes de la sesión registró un escrito desdiciéndose de su renuncia. Así que los sorprendidos corporativos celebraron la sesión con otros dos puntos de trámite que figuraban, además, en la convocatoria de la sesión extraordinaria, pero no el de la renuncia del regidor de Arrabalde.
En la sesión se llegaron a manifestar claras desavenencias entre los propios concejales populares, del equipo de gobierno, al preguntar al hasta hace unas horas dimitido alcalde el porqué de su cambio de parecer. Entre discusiones con tono bronco el alcalde llegó a justificar su renuncia alegando razones de stress emocional. El concejal socialista también insistía en conocer este giro completo, de presentar el escrito de renuncia al cargo de alcalde y al acta de concejal a registrar otro escrito, poco antes del Pleno en el que se daba a conocer oficialmente tal renuncia, con la confirmación de que seguía al frente de la corporación municipal. Desde la oposición se requería información no sólo por el motivo de la renuncia, sino también por el cambio de parecer a última hora. El alcalde argumentó en su defensa tener proyectos pendientes que ejecutar en el municipio.
Sin lugar a dudas, la sesión rocambolesca del Pleno de Arrabalde ha sorprendido al vecindario, sin llegar a conocer las razones del porqué primeramente dimitía su alcalde y del porqué a última hora había cambiado de parecer.
Puestas asi las cosas, la corporación municipal de Arrabalde queda como hasta antes de la dimisión del alcalde, cuatro concejales del PP y 1 del PSOE.
