El proyecto lógístico del «Puerta del Noroeste» de Benavente se encuentra en fase de redacción de Planes de Actuación y Funcional por parte de las empresas adjudicatarias. En todo caso, la demora viene siendo más que notoria y lo que ya tenía que estar en obras se aventura para el próximo año 2022. Eso, las primeras actuaciones que afectarían a la urbanización exterior.
Recientemente el diario El País se hacía eco del revulsivo que será para Benavente y la comarca este enclave logístico como un nodo de interconexión empresarial, asentamientos de actividad industrial y proyectos de reindustrialización que se traduciría en una más que abultada cifra generadora de empleo, tanto en puestos de trabajo directos como indirectos.
El rotativo ponía en boca de la Asociación de Centros de Transporte y Logística de España, de la ACTL, que la construcción de este nodo «comenzará previsiblemente en 2022» y que «generará unos 18.000 empleos directos e indirectos». A todas luces los datos no cuadran y se supone que se tratará de un grave desliz, más propio de una redacción al uso publicitaria. Es bien claro que será una fuente de empleo, y bienvenida sea para una zona más que deprimida, pero las cifras están más que desorbitadas y los plazos ya superados.
Las previsiones más optimistas apuntan a que las 58 hectáreas de la ampliación del CTLBenavente pasarían por generar un potencial, en su máximo desarrollo, de 1.800 empleos, directos e indirectos. En su máximo desarrollo, eso quiere decir que en un horizonte de 15 años, cuando se completen las actuaciones en el marco de las fases previstas.
Veamos el faseado de desarrollo de las actuaciones:
Los trabajos de la denominada fase 0 que afectaría a la urbanización exterior de las 58,7 hectáreas estaban previstos de ejecutar en el año 2020 para completarse en los dos primeros años. Esta actuación se simultanearía con lo que se denomina como primera fase en la que se llevaría a cabo la edificación de las 15 hectáreas de parcelas logísticas e implicaría la urbanización interior de 39.629 metros cuadrados de suelo, la construcción de 33.806 metros cuadrados de naves y 1.690 metros cuadrados de oficinas. También estaba previsto para 2020 y su conclusión en 2021.
Para siete años más tarde se prevé el arranque de la fase segunda con la urbanización interior de 19.184 metros cuadrados de suelo, la construcción de 16.903 metros cuadrados de naves y 845 metros cuadrados de oficinas.
Otros siete años posteriores se prevé la fase tres con una actuación idéntica en dimensión a la fase anterior. Es decir, que en el caso de haberse iniciado las obras en los plazos previstos, hablaríamos del 2035. Ese horizonte se podría alargar por más años. O lo que es lo mismo, la urbanización estaría planteada en una fase inicial de 2 años de duración y el desarrollo de parcelas en 3 fases de 7 años cada una. Todo ello en base al Plan de Viabilidad de la ACTL contratado por el Ayuntamiento por un importe de 94.500 euros y hecho público en junio de 2018.
Una cosa si está clara, que los empleos previstos que generarían las 58 hectáreas de la ampliación del CTLBenavente o el denominado polígono Puerta del Noroeste, una vez en su máximo desarrollo, podrían ser de 1.800 empleos directos e indirectos. Que no es moco de pavo, pero no las más que abultadas cifras que señalaba el rotativo madrileño.
Según El impacto socio económico del área industrial, siempre apuntando en su máximo desarrollo, teniendo el horizonte del 2037, sería el de tener el potencial de gestionar alrededor de 2.500.000 toneladas anuales de mercancías y 580.000 vehículos industriales al año desde el centro, habiendo dado lugar a una inversión privada inducida de casi 74 millones de euros a la que se suman otros casi 12 millones de euros de inversión pública.
Nunca he leido en ningun medio escrito que el Polígono estaria para el 2020, siempre se ha dicho que las obras comenzarian en 2022 y estarian a la venta las primeras parcelas en 2023, lo demas es querer confundir Sr. Casquero.