Un grupo de voluntarios de Santa Cristina de la Polvorosa, todos ellos cofrades, unos de la Virgen de Dolores y otros del Bendito Cristo, se aprestaban esta tarde en la iglesia a disponer todo lo necesario para los actos procesionales de la Semana Santa. Entre sogas y poleas descendían las andas y la plataforma rodante del almacén parroquial para que la imagen de la Virgen Dolorosa recoja la honda devoción en el presbiterio y posterior desfile en la noche del Viernes Santo. Todo ha de estar listo cuando mañana miércoles se abra el Tríduo en honor a Nuestra Señora de los Dolores.
La imagen de la Virgen Dolorosa, representada en una Piedad, una escultura del siglo XVIII, de autor anónimo, no se encuentra ya en su sede, en el altar del lateral derecho de la iglesia, sino en el presbiterio porque en estos tres días es la protagonista. Por eso es la titular de la cofradía y con todos los honores.
La pesada escultura de madera de pino era asentada con una proeza maestra y con mimo en el pedestal de las andas por dos devotos. Mientras, otro grupo de colaboradores se encargaba de sujetar firmemente la imagen y de instalar faroles, así como de la limpieza. El ornato con flores y el delicado manto virginal quedan para la misma jornada del inicio del Tríduo.
Al igual que en esta tarde del martes se llevaban a cabo los preparativos para el Viernes de Dolores y la Semana Santa, en una jornada posterior se hará lo mismo con la imagen del Bendito Cristo para su desfile en la noche del Jueves Santo.
Así son los preparativos para los actos de la Semana Santa en Santa Cristina de la Polvorosa, en consonancia a como se realiza en la mayoría de la parroquias donde se organizan desfiles procesionales. Gracias a los colaboradores se permite que todo luzca con el boato característico de una Semana de Pasión.
FOTOS M. A. C.
