Los pasillos del Colegio Virgen de la Vega de Benavente se llenaron de emoción y aplausos este jueves. Los alumnos de primaria formaron un pasillo de honor y aplaudieron sin descanso al profesor Rafael Miñambres Mayo, quien tras 41 años de entrega a la enseñanza se despide del centro que ha sido su segunda casa. Con lágrimas en los ojos y una sonrisa llena de orgullo, Miñambres recorrió el colegio por última vez, rodeado del cariño de sus estudiantes y colegas.
Una despedida cargada de emociones
El recorrido culminó en el salón de actos, donde su familia, profesores, alumnos y exalumnos lo recibieron con una ovación. Rafael Miñambres, emocionado y sorprendido, agradeció a todos por el gesto inesperado. “Parece que estoy en un sueño”, confesó ante la multitud. Con 41 años de carrera y 22 de ellos como director, Miñambres deja una huella imborrable en el colegio y en todos los que han sido sus alumnos.
Un legado de 41 años dedicados a la docencia
Miñambres comenzó su trayectoria a los 23 años, especializándose en Geografía e Historia, y durante más de dos décadas lideró el colegio como director. “He pasado momentos difíciles, pero siempre les digo a mis compañeros que compensa mucho dedicarse a esta profesión”, destacó Miñambres en su discurso. El profesor recordó cómo ha disfrutado cada etapa, desde los pequeños desafíos hasta los grandes logros, siempre priorizando la conexión y comprensión de sus alumnos.
Una merecida placa conmemorativa
Durante el homenaje, el colegio preparó un emotivo vídeo que repasó los momentos más significativos de la trayectoria de Miñambres. El vídeo despertó risas y aplausos de los presentes. Además, se le entregó una placa conmemorativa en reconocimiento a su dedicación y liderazgo.
Los colegas de Miñambres también compartieron palabras de gratitud y admiración: “Rafa, yo te he tenido de profesor, te he tenido de compañero, y te he tenido de, casi podría decir, de paño de lágrimas estos, bueno, dos últimos años. Agradecerte tu labor pedagógica, aquí tienes un resultado de ello”, resaltaron.
Palabras de gratitud y despedida
Visiblemente emocionado, Rafael Miñambres dedicó sus últimas palabras a sus alumnos y compañeros, animándolos a seguir adelante en la docencia. “No sé si me lo merezco, pero realmente ellos sí sé que se merecen mi cariño y las palabras que les he expresado a todos”, afirmó Miñambres. Ahora, se abre para él una nueva etapa, cargada de nuevas experiencias y tiempo para disfrutar de lo que más le gusta.
Con su legado como educador, mentor y líder, Rafael Miñambres Mayo deja una marca imborrable en el Colegio Virgen de la Vega. “La Vega siempre será tu casa”, le recordaron sus colegas en su despedida.