El inicio de las fiestas daba comienzo ayer con el tradicional chupinazo, pero este año con un sabor amargo por el fallecimiento de Santiago Domínguez.
La Plaza Mayor de Benavente se llenaba de gente no solo para recibir las fiestas sino para rendir un sentido homenaje al que fue durante muchos años el abanderado de la Peña San Isidro. Las peñas iban llegando a la plaza sin la música de sus charangas, pero con crespones negros en sus banderas. Durante el discurso del alcalde, se guardó un minuto de silencio acompañado de una composición de la Banda Maestro Lupi de Benavente que finalizaba con el aplauso masivo de todos los allí presentes. En palabras del alcalde de Benavente, Luciano Huerga, disfrutar de las fiestas y mucho respeto a los toros. Al finalizar este espacio informativo podrán disfrutar del acto completo.