COMARCA

El incendio de la Sierra de la Culebra ha afectado a más de 60 especies de vertebrados y 20 hábitats ecológicos

El informe de SEO/BirdLife aboga por medidas preventivas que eviten que los incendios se produzcan y que si lo hacen no se desarrollen con tanta virulencia

El incendio que ha arrasado casi 31.000 hectáreas en el corazón de la Sierra de la Culebra, extendiéndose al Valle del Tera, ha podido llegar a afectar a más de 60 especies de vertebrados y a una veintena de hábitats de alto valor ecológico protegidos por la normativa de la Unión Europea. Así lo refiere en su informe la organización no gubernamental SEO/BirdLife.

En este demoledor informe se refieren a lagunas, a brezales, encinares, bosques de galería y estepas agrarias y a más de 60 especies de vertebrados incluyendo aves amenazadas como el alimoche común, el aguilucho cenizo o el sisón común, y taxones tan emblemáticos como el lobo ibérico, el topillo de Cabrera o la nutria.

Villardeciervos, foto de José Antonio Núñez

«Insistimos en la necesidad de adaptar los recursos de gestión de incendios a la nueva realidad derivada del cambio climático, que ya está ampliando el periodo y los episodios de riesgo extremo de incendio en Castilla y León, y en el conjunto de la península Ibérica.  Al mismo tiempo, subrayamos que, para prevenir y minimizar las consecuencias de incendios masivos e incontrolados, como el vivido en Zamora, es fundamental dedicar recursos a mantener los espacios naturales en buen estado de conservación, apostar por la restauración de zonas degradadas y mejorar la conectividad entre zonas naturales», resalta el informe de SEO/BirdLife.  

Afección a una veintena de hábitats 

La sierra de la Culebra está declarada como Zona Especial de Conservación de la Red Natura 2000. Entre los valores que, con esta protección, se pretenden conservar destaca una amplia variedad de hábitats considerados prioritarios por las autoridades comunitarias. Lagos eutróficos naturales, estanques temporales mediterráneos, brezales, matorrales termo-mediterráneos, zonas de estepas de gramíneas, prados, depresiones sobre sustratos de turba, roquedos, bosques de ribera, robledades, estepas agrarias o encinares. 

Dada la amplia extensión del incendio –30.800 de las aproximadamente 70.000 hectáreas que tiene este espacio Natura 2000– y la variedad de hábitats distribuidos a lo largo de esta sierra, que debe su nombre a su forma ondulante, es probable que la mayor parte de los hábitats por los que se reconoce su valor ecológico se hayan visto afectados.  

En el caso de la fauna, la situación puede haber impactado de manera severa en aquellas especies que se encuentran en este momento en pleno periodo reproductor. Entre otras, se incluyen especies en peligro según el Libro Rojo de las Aves de España, como el milano real, que ha perdido un 50% de su población reproductora entre 1994 y 2014 en España; la carraca europea, que experimenta declives de hasta el 80% en tres generaciones; o el martín pescador, que ha perdido a la mitad de sus efectivos en los últimos 20 años. A ellos se unen otras especies con poblaciones en riesgo, como el alimoche común, el aguilucho cenizo, el cernícalo primilla, la ganga ortega o el sisón común, que próximamente será declarado oficialmente “En Peligro de Extinción” en España.  

Prueba de la rica biodiversidad de la Sierra de la Culebra son las referencias registradas por la plataforma e-bird, de la que SEO/BirdLife es colaboradora, con puntos en los que se han registrado hasta 115 especies de aves diferentes a lo largo de los últimos diez años.  

El nuevo Libro Rojo de las Aves de España, publicado por SEO/BirdLife en 2021 y que constituye una radiografía de las aves en situación de riesgo de extinción en nuestro país, recoge como amenaza directa para la avifauna los incendios y, en concreto, el aumento de su intensidad y frecuencia. Como factor de la alteración de ecosistemas, y junto a cuestiones como la extracción de agua o la degradación de los hábitats, los incendios suponen una amenaza para el 70% de las especies de aves en riesgo de extinción en España.  

Incendio en Sierra de la Culebra

Adaptarse a la nueva realidad climática 

“El cambio climático está ampliando el periodo en el que, por altas temperaturas, sequías, tormentas y vientos, el riesgo de incendios se convierte en crítico. Ya no se puede acotar la temporada de incendios exclusivamente a los meses de verano, y es preciso que las comunidades autónomas, los servicios de apoyo del Gobierno de España y los ayuntamientos, adapten sus sistemas de respuesta contra el fuego a la nueva realidad climática, que ya está aquí”, señala Ana Carricondo, coordinadora de programas de conservación de SEO/BirdLife. 

“Pero más allá de los sistemas de respuesta, es preciso adaptar las políticas y los recursos destinados a desarrollar labores preventivas que eviten que los incendios se produzcan y que si lo hacen no se desarrollen con tanta virulencia.. Un espacio natural en buen estado de conservación y con una adecuada gestión durante todo el año es clave para prevenir y minimizar los peores estragos del fuego, y puede ser fundamental para hacer frente a grandes incendios, los llamados incendios de sexta generación”, señala Carricondo. Y añade: “Además, para minimizar el impacto de los incendios sobre las especies y favorecer la regeneración de las superficies quemadas, es clave asegurar una buena conectividad entre espacios naturales, que permita que la fauna pueda escapar de los incendios y encuentre zonas de refugio y alimentación. Por último, es fundamental que ante un desastre de estas características se desarrollen las medidas y actuaciones necesarias para que las labores de restauración de las áreas incendiadas de implementen lo antes posible, garantizando los medios económicos y humanos necesarios”.  

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Botón volver arriba

Adblock Detectado

Por favor, considere apoyarnos mediante la desactivación de su bloqueador de anuncios. Gracias.