La campiña luce ahora todo su esplendor y augura buenas cosechas. No obstante, los agricultores no se las traen todas consigo, porque «siempre hay que estar atento al cielo, pues pueden venir tormentas y todo nuestro gozo en un pozo», señalan. Si los campos «lucen bonitos» y se esperan buenas cosechas, en cambio los precios descienden como una plomada.
Por eso, claman precios justos para el campo, que la cadena alimentaria se haga efectiva. Y esto lo siguen diciendo en un día muy señalado para el sector, en la fiesta de su patrón San Isidro labrador.
En la localidad vidrialesa de Santibáñez se celebra en esta jornada fiesta local, el 15 de mayo junto al 24 de junio, el patrón San Juan Bautista, constituyen las dos fiestas locales de esta localidad. Y San Isidro no es una fiesta cualquiera, es la fiesta más emotiva. Eso sí, caiga en el calendario cuando caiga. En esta ocasión coincide en jueves y Santibáñez de Vidriales honra a su copatrón con toda solemnidad.
La procesión con las imágenes del Santo Isidro y de la Virgen del Carmen eran portadas por los devotos hasta las afueras del casco urbano para la bendición de los campos, en un desfile animado por la música tradicional de Fole Feroz. De regreso a la iglesia se celebraba la solemne misa en la que el coro parroquial dio, una vez más, el do de pecho con sus acompasadas voces.
Santibáñez de Vidriales continúa esta tarde el festejo, diseñado por la Cámara Agraria Local y el coto de caza de Santibáñez y Tardemézar, con atracciones infantiles en el Parque de El Ferial y una parrillada de carnes y bailes con la disco móvil Enjoy, como ya se publicó en Benavente Digital.
Fotos: M.A.C.




