El Boal F.S será el rival con el que el Atlético Benavente abra el telón de la temporada 2019-2020 con la intención de volver a repetir el final de la anterior.
Será el 14 de septiembre en la Rosaleda cuando el equipo de Chema Sánchez que poco a poco se va remozando y con el que pretenden volver a conectar con una afición que espera con ansias la llegada el momento del pitido inicial para, una vez más, meterse en la piel de sus jugadores y achuchar de inicio en busca del objetivo.
Una temporada en la que serán cuatro los equipos que luchen por el ascenso, cambia en relación a la temporada anterior donde solamente el primero lo disputaba, y donde hay caras nuevas como el Prone Lugo, que debió ser admitido, el Gijón Playas, el Ribeira F.S o el no tan desconocido Unión Arroyo que conseguía ascender en el grupo castellano leonés. La temporada se queda huérfana de derbi provincial.
Este cuadro vallisoletano será el primero en recibir fuera de la Rosaleda al Desguaces Casquero en la segunda jornada y se detendrá el 21 de diciembre por el parón navideño coincidiendo con el final de la primera vuelta y la visita a la Rosaleda del ex equipo del nuevo fichaje, aún por confirmar, Dilin el Pizarras Tres Cuñados. El 2020 no verá fútbol sala hasta el 11 de enero con la visita del equipo de Chema Sánchez al Boal fijándose el final de temporada para el 2 de mayo cuando el equipo benaventano se desplace a tierras gallegas para medirse al Tres Cuñados.