La Guardia Civil les incauta dispositivos nocturnos térmicos para la práctica de la caza que se encuentran prohibidos en el territorio de Castilla y León.
El coto de caza «el Castro» de Camarzana de Tera ha formulado denuncia contra dos cazadores que se encontraban ejerciendo la actividad cinegética careciendo de permiso en el territorio y portando dispositivos nocturnos como un monocular térmico, instrumentos prohibidos en Castilla y León.
Los dos cazadores fueron sorprendidos por socios del coto de Camarzana cuando se encontraban cazando en la madrugada del domingo pasado en la zona de «el Prado», junto a la carretera de Cabañas y en las inmediaciones del puente de la autovía, en la zona de seguridad. Los socios del coto alertaron a la Guardia Civil cuyos agentes, tras solicitarles la documentación, les incautaron un monocular térmico. Un dispositivo prohibido según la Ley de Caza de Castilla y León, vigente desde el pasado 8 de agosto, y que en su artículo 34 señala que «se prohíbe el empleo de las fuentes luminosas artificiales, espejos o dispositivos para iluminar los blancos o dispositivos de visor que incluyan un convertidor de imagen o un amplificador de imagen electrónico para tiro nocturno, incluídos los visores térmicos».
Los denunciados, según han explicado desde la directiva del coto de caza «el Castro» de Camarzana, portaban rifles que en el momento de la llegada de los agentes estaban enfundados. Al parecer, estos cazadores furtivos gestionan un coto de caza en una localidad de la zona, han explicado las mismas fuentes.
Se da la circunstancia que en la zona donde fue requisado el material de caza furtiva prolifera el paso de venados, algunos de estos animales aparecen muertos en el campo con la señal del proyectil mortal y la cabeza decapitada llevada como trofeo.