La doctora Sara Bravo, descendiente de Santa Cristina de la Polvorosa y fallecida el pasado 28 de marzo a causa de la COVID-19 cuando ejercía como médico de familia en Mota delCuervo (Cuenca) ha sido nombrada Molinera de Honor a título póstumo por la asociación los Molinos de la villa conquense. Así lo ha comunicado el periódico digital Voces de Cuenca.
Junto a esta distinción, la asociación ha reconocido también al personal del Hospital Mancha Centro de Alcázar de San Juan, al que estaba adscrita el área de salud de Mota del Cuervo, con los galardones de Quijote Universal, Dulcinea y Molinero Universal, en un acto que se celebra este domingo 6 de septiembre.
Sara Bravo fue la médico más joven de España en fallecer del coronavirus cuando tenía 28 años. La fatal noticia entristecía a los vecinos de la villa conquense donde trabajaba y a los de la localidad materna de Santa Cristina de la Polvorosa. El Ayuntamiento de esta localidda de<la comarca izó entonces la bandera a media asta en señal de luto.