
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha anunciado este martes en la Comisión de Interior del Senado la intención de su departamento de rebajar la velocidad máxima permitida de 100 a 90 kilómetros por hora en todas las carreteras secundarias. «Trataremos de reducir la velocidad máxima autorizada en las carreteras secundarias; no se asusten; el 77% de los fallecidos en carretera son en las vías secundarias con doble sentido compartida», ha señalado este martes en la Comisión de Interior del Senado.
Actualmente, el límite en las vías secundarias está establecido en 100 kilómetros por hora, aunque en algunas carreteras es de 90, dependiendo del ancho del arcén. Según ha explicado Marlaska, su departamento tratará de igualar a 90 kilómetros por hora la velocidad en todas estas carreteras.
Para el ministro, esta medida supondría la «homologación» de España con los países de referencia de la UE y serviría para «simplificar el cuadro de velocidades límite» y para «facilitar la comunicación con el conductor».
Precisamente, la reducción de la velocidad ha estado sobre la mesa en la DGT desde hace años, con María Seguí y Gregorio Serrano al frente, pero en este tiempo no se hizo por «miedo», según desveló la exdirectora general del organismo entre los años 2012 y 2016.